JJSS exige que el Plan de Garantía Juvenil se ponga en marcha

El secretario provincial de Juventudes Socialistas en Ciudad Real, Rubén Sobrino, instó ayer a los gobiernos central y autonómico a «que no esperen a las elecciones y pongan en marcha de una vez el Plan de Garantía Juvenil, un plan que hasta ahora solo ha servido para crear una página web donde se filtran las ofertas de algunos portales de empleo y otros servicios públicos autonómicos».

Ofertas además que, por otra parte y en la mayoría de los casos, dijo, no se ajustan a los perfiles de los desempleados porque exigen titulaciones y experiencia en menores de 25 años y que «suponen una auténtica inutilidad».

Y es que para el dirigente juvenil «la recuperación económica de la que tanto se vanagloria el PP es una farsa para los jóvenes de Castilla-La Mancha» que, según denunció, viven una «pésima situación» tal y como se refleja en los datos de la última Encuesta de Población Activa (EPA) que concluyen que 2 de cada 3 jóvenes de entre 16 y 25 años están en paro.

De este modo, dijo, la tasa de desempleo se eleva hasta el 62%, el mayor porcentaje de todo el país, que en el caso de los jóvenes menores de 20 años se dispara hasta el 82%, porcentajes que sitúan a la región en cabeza de este registro.

Sobrino se detuvo en «el brusco descenso de la población activa, que se ha reducido de 28.700 personas que se corresponden con los jóvenes que han tenido que emigrar fuera de nuestras fronteras en busca de una oportunidad laboral». En ningún caso se trata de casos de internacionalización «como así quieren hacer ver los integrantes de la organización juvenil del PP», Nuevas Generaciones, sino que «es un claro exilio económico fruto de las nefastas políticas en materia de empleo juvenil llevadas a cabo por Rajoy y Cospedal».

El dirigente, por otra parte, se mostró convencido de que esta situación cambiará partir del 25 de mayo cuando el candidato del PSOE, Emiliano García-Page, esté al frente del Gobierno de Castilla-La Mancha desbancando a Cospedal. Un cambio en materia laboral porque los socialistas se han comprometido a poner en marcha un contrato-puente en empresas para todos los jóvenes que terminen sus estudios universitarios y de formación profesional al que se destinarán 40 millones.