Acto de Cerveceros de España en Toledo
La Escuela de Hostelería marida el queso manchego y la cerveza
Jarrete de ternera glaseado sobre compota de calabaza, castaña y setas con una lager extra; polvo helado de queso manchego con arenque encurtido y caviar de albahaca y membrillo y ceveza de abadía; o raviolí negro de boletus con crema de queso y regaliz con negra stout. La Escuela de Hostelería de Adolfo en Toledo vivió ayer unas jornadas de formación en las que los alumnos tuvieron que maridar esta bebida con el producto típico de la tierra, en este caso el queso manchego.
Todas las propuestas reivindicaron la tradición de la cocina manchega, añadiéndole un toque de vanguardia. Además, se habló de la cerveza y su papel en la gastronomía. Desde su historia, hasta sus ingredientes, elaboración o variedades.
El acto fue organizado por Cerveceros de España y en él colaboró el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Queso Manchego. Juan Muñoz, presidente de la Academia de Sumillería y portavoz de Cerveceros, explicó a los alumnos que para servir esta bebida es fundamental «cuidar todos los detalles: la temperatura, la espuma, la presentación en la mesa, el recipiente adecuado a cada variedad...».
Según la organización de las jornadas, que agrupa a la práctica totalidad de los productores de cerveza, el año pasado Toledo formó parte de la tercera zona de España en la que más cerveza se comercializó.