A José Serrano Siquier
Cruz de San Raimundo de Peñafort al exdecano de los abogados

La Abogacía es necesaria para garantizar la libertad ya que «sin abogados, sin Ley y sin Justicia no habría Estado de Derecho, y sin Estado de Derecho no tendríamos democracia». Así lo destacó la presidenta del Gobierno de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, en el acto solemne de imposición de la Cruz Distinguida de Primera Clase de San Raimundo de Peñafort a José Serrano Siquier, abogado y exdecano del Ilustre Colegio de Abogados de Albacete durante diez años.
El evento, celebrado en el salón de plenos del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, contó con una nutrida representación de la abogacía de la región y de Albacete, en particular, donde Serrano Siquier ejerce su profesión. Estuvo presidido por el presidente del TSJCM, Vicente Rouco; el fiscal jefe de Castilla-La Mancha, José Martínez; el decano regional de los abogados, José Luis Vallejo, y el decano del Colegio de Abogados de Albacete, Julio García Bueno.
Según destacó Cospedal en su intervención, «imponer esta Cruz a un jurista con tantos méritos, a través de una dilatada carrera, es un gran honor, por tratarse de una persona que ha hecho del ejercicio de su profesión una práctica marcada por la vocación del servicio a los demás».
Asimismo, la presidenta incidió en que Albacete es una ciudad que ha crecido marcada por la actividad judicial, tanto por la antigua Audiencia como por el actual Tribunal Superior de Justicia. Precisó que la tarea llevada a cabo por Serrano Siquier es propia de «esa estirpe de abogados que han servido intelectualmente a su ciudad, enriqueciéndola culturalmente con un servicio importante a los ciudadanos, con un compromiso permanente».
Destacó de este abogado su honradez, integridad y rectitud, con una vocación de jurista atento a las necesidades de los demás. «Su misión en el Derecho es la de un abogado que sabe que la Justicia es igual para todos».
Para Serrano Siquier la de ayer fue una jornada muy emotiva y difícil de olvidar. La hizo también «especial» el hecho de que la presidenta regional asistiera al acto «realzándolo», como así se refirió el homenajeado.