¿Por qué hay una placa con la altitud sobre el nivel del mar en todas las estaciones de tren españolas?
Durante el reinado de Isabel I se llevó a cabo la titánica labor de medir la altitud de gran parte de España
Es prácticamente imposible establecer a escala global un ascenso o descenso del nivel del mar, debido a que existen costas de emersión –se encuentran a mayor altura sobre el mar a medida que pasa el tiempo- y costas de sumersión –se sumergen progresivamente-. Esto propició que en el siglo XIX cada país decidiese usar de forma arbitraria una cota cero a partir de la cual se calcularían las distintas altitudes, a las cuales se denominaron cotas ortométricas.
De esta forma, Alemania optó por Amsterdam, Italia por Génova, Francia y Suiza por Marsella, y Austria por el mar Adriático. En España se eligió a Alicante como punto de referencia, debido a que las fluctuaciones de la marea terrestre -la diferencia del nivel del mar entre la bajamar y la pleamar- era de tan sólo unos 20 centímetros, la menor de toda la península. Una cifra ridícula en comparación con los 4,4 metros que puede variar, en un mismo día, la fluctuación del nivel del mar en zonas como San Sebastián.