Oumuamua
El segundo viajero interestelar se acerca a la Tierra
2I/Borisov alcanzará su distancia más cercana del Sol este domingo y a finales de diciembre estará a algo más de dos distancias astronómicas de nuestro planeta
El pasado 30 de agosto, los astrónomos de la NASA , la ESA y la Red Internacional Científica Óptica (ISON) anunciaron que el segundo viajero interestelar, bautizado como 2I/Borisov , había sido detectado por la humanidad. Venido de más allá de nuestro Sistema Solar, parece que en torno a este objeto hay menos misterio que su predecesor, Oumuamua , al que solo se pudo ver en los momento finales en los que abandonó nuestro vecindario cósmico. Sin embargo, Borisov será visible por los telescopios humanos durante más o menos un año, si bien cuando mejor podremos observarlo es justo este mes.
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El cometa Borisov, del que ya hemos visto varias imágenes , pasará el próximo día 8 de diciembre por el perihelio solar (la zona más cercana de su órbita a nuestra estrella), cerca del borde interno del cinturón de asteroides. Habrá que esperar a finales de mes para que el viajero interestelar se acerque a nuestros dominios, pasando a «tan solo» algo más de dos unidades solares de la Tierra (unos 300 millones de kilómetros -dos veces la distancia entre el Sol y nosotros, lo que no hace temer por la seguridad de nuestro planeta).
Lo que sabemos de Borisov
Entre las señales que indican que Borisov es un objeto interestelar es su trayectoria altamente excéntrica -es decir, es tan abierta que no tiene en su centro ningún objeto del Sistema Solar). Rastreando este camino, los científicos han rastreado su origen , que probablemente se sitúe en la constelación de Cefeo , concretamente del sistema de la estrella Kruger 60 , a unos 13 años luz de nuestro vecindario cósmico.
Al contrario que su antecesor, del que aún no se tiene claro qué tipo de cuerpo es , Borisov está catalogado como cometa. De hecho, presenta características muy parecidas a los cometas de nuestro Sistema Solar, lo que indica que no habría grandes diferencias de nuestro vecindario cósmico con los demás.
Este segundo viajero interestelar contaría con un núcleo sólido -formado por material congelado como agua o dióxido de carbono - de 1,6 kilómetros de diámetro, si bien su característica cola se extiende hasta caso los 160.000 kilómetros. Si lo comparamos con la Tierra, esto significa que en conjunto es catorce veces más grande que nuestro planeta , que mide casi 13.000 kilómetros de diámetro. Para poner en perspectiva estos datos, un equipo de astrónomos y físicos de la Universidad de Yale capturó una imagen en «primer plano» del cometa , la más clara hasta ahora. En ella se puede observar que se está evaporando a medida que se acerca a la Tierra, liberando gas y fino polvo por la cola.
¿Agua interestelar?
De hecho, según un estudio de la NASA que aún no ha sido revisado, además del gas en forma de cianógeno expulsado de su superficie , -algo común en los demás cometas de nuestro Sistema Solar-, este cuerpo presentaría grandes cantidades de oxígeno a su alrededor, posiblemente como resultado de que el hielo de agua se convierta de sólido a gas al ser calentado por el Sol. «Los astrónomos están aprovechando la visita de Borisov, utilizando telescopios como Keck para obtener información sobre los componentes básicos de los planetas en sistemas distintos al nuestro», señaló Grergory Laughlin, quien junto a su equipo tomó la fotografía más cercana el pasado 24 de noviembre usando el Espectrómetro de Imágenes de Baja Resolución del Telescopio Keck I , ubicado en el Observatorio WM Keck en Manua Kea, Hawai.
Este cometa y su predecesor, Oumuamua, han creado conciencia y debate sobre la presencia de objetos interestelares en nuestro Sistema Solar y la frecuencia con la que se adentran en nuestros dominios. En los próximos años, las agencias espaciales de todo el mundo esperan poder llevar a cabo misiones para interceptar y estudiar a estos cuerpos, que algunos estudios afirman que se acercan por cientos al año .