El experimento cuántico mundial que ha derrotado a Einstein
Más de 100.000 voluntarios de todo el mundo aportan la aleatoriedad humana para confirmar unas extrañas propiedades de las partículas subatómicas que incomodaban al genial científico
«¿Crees que la Luna desaparece cuando dejamos de mirarla?». Esta pregunta, atribuida a Albert Einstein en sus famosas discusiones por correspondencia con su colega Niels Bohr , resume una idea clave del pensamiento del genio: que las propiedades de las cosas están definidas de forma objetiva, independientemente de que las midamos o no, lo que se llama «realismo local». Pero en el mundo cuántico , el de las diminutas partículas, las cosas no parecen comportarse con la lógica de la experiencia cotidiana. Una extraordinaria prueba denominada The BIG Bell Test , en la que han participado más de 100.000 voluntarios de todo el mundo, ha demostrado a lo grande que Einstein, a pesar de su enorme intuición, no acertó en este punto . Los resultados, que ahondan en las rarezas del Universo, aparecen publicados esta semana en la revista «Nature» . Y uno de los aspectos más interesantes es que no han sido las máquinas las que lo han logrado, sino la maravillosa capacidad humana del libre albedrío .
El 30 de noviembre de 2016, el Instituto de Ciencias Fotónicas (ICFO) de Barcelona invitó a cualquiera que pudiera estar interesado a enfrentarse a un videojuego online en el que debían introducir ceros y unos de forma aleatoria. La convocatoria fue todo un éxito y superó con creces el número de 30.000 participantes que los científicos consideraban necesario para sus propósitos. Los voluntarios, conocidos como «Bellsters», generaron más de 90 millones de bits impredecibles que fueron enviados a experimentos cuánticos simultáneos repartidos en doce laboratorios en Brisbane (Australia), Shanghai, Viena, Roma, Munich, Zurich, Niza, Barcelona, Buenos Aires, Concepción (Chile) y Boulder (Colorado, EE.UU.)