Timo científico: un solo chino detrás de 32 artículos y 28 grupos de investigación
Dos investigadores españoles destapan un caso de mala praxis en investigación biomédica
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Decidieron hacer una búsqueda bibliográfica sobre los temas más publicados en las revistas científicas y toparon con lo que ellos han denominado como «la punta del iceberg» de un caso sin precedentes de mala praxis en investigación. Buceando entre las más prestigiosas publicaciones, el investigador del Departamento de Ciencias Experimentales y de la Salud (CEXS) de la Universitat Pompeu Fabra de Barcelona (UPF), Lucas Carey, junto con el investigador del Centro de Regulación Genómica (CRG) Guillaume Filion descubrieron una serie de artículos científicos «inquietantemente similares».
En concreto hallaron 32 trabajos de investigación muy parecidos, firmados por 28 grupos de investigación chinos supuestamente no relacionados entre sí, pero que podrían estar creados por un mismo autor. Es la conclusión a la que han llegado Carey y Filion tras hacer una búsqueda bibliográfica y trabajar con la base de datos científica PubMed (en concreto, con 1.980.000 resúmenes de artículos publicados desde 2012).
La clave de la sospecha
En su búsqueda, Carey y Filion se dieron cuenta de que una de las palabras clave más repetida era «Ciscom», que es la base de datos de literatura médica del Research Council for Complementary Medicine. Esta base de datos, disponible desde 1995, era mencionada en dos artículos por año, según explican los autores, y, sorprendentemente, a partir de febrero de 2014, «el número de visitas se empezó a disparar». Buscando las causas de este repentino incremento toparon con los citados trabajos de metanálisis (un tipo de análisis que contempla los resultados de diferentes trabajos sobre un mismo objeto de estudio).
Los autores han afirmado no querer desprestigiar a sus colegas chinos, pero han apuntado que el caso cuestiona las buenas prácticas científicas «tanto de los autores como de los editores» que han publicado estos trabajos. La revista «ScienceInsider» se ha hecho eco del hallazgo, citando el blog personal de Filion.