Licia Maglietta interpreta a una viuda blanca siciliana en el Lliure de Gràcia
«Manca solo la domenica» llega a Barcelona tras estrenarse en Milán en 2009
Licia Maglietta es Borina Serrafalco. Licia y Borina viajan juntas desde marzo 2009 cuando se estrenó «Manca solo la domenica» en el Teatro Studio Piccolo de Milán. El montaje que ocupa estos días el escenario del Teatre Lliure de Gracia (hasta el domingo 15 de marzo) bebe de la novela «Pazza è la luna», de Silvana Graso. «Viajo con un texto que se ha representado en toda Europa, incluso en Gerona –explica Licia Maglietta que vivió en Barcelona en los años setenta y estudió flamenco-. La autora es cien por cien siciliana y utiliza un lenguaje muy arcaico que incluso los sicilianos apenas lo entienden».
La fuerza de esta historia atrapó a la actriz desde el minuto uno. «No me interesan los textos que no tengan sustancia. Aquí interpreto a una viuda blanca, una mujer a la que su marido le abandona y al que ha querido localizar sin suerte alguna. Pasa el tiempo ella rehace su vida y un buen día su marido vuelve a casa como el amo y señor».
«La vuelta del marido es un problema muy serio que destruye su vida, su fantasía… -desvela Maglietta-. Ante esta situación insostenible sólo hay una solución. Pero no explicaré cuál es la solución porque es la parte más delirante del libro y tiene que ser una sorpresa para el espectador».
Licia está acompañada en escena por Vladimir Denissenkov que toca el acordeón. «La música es un personaje y el músico otro personaje –aclara Licia-. Es un espectáculo escrito con música; toda la obra es una partitura en el que el texto y la música se entrelazan».
La actriz italiana destaca que es una pieza muy divertida pero que no es cómica. «De todo los lugares donde la hemos interpretado, sólo en Sicilia la reciben con dolor. Como anécdota resaltar que en París me dijeron que podía ser una mujer del sur de Francia». Del siciliano al catalán. «La experiencia en Gerona fue muy calurosa y lo entendieron muy bien. Pero sin duda la mejor traducción ha sido la francesa». «Manca solo la domenica» es un viaje a la Sicilia más profunda de la mano de una mujer muy peculiar.
