El 38,6% de las empresas aplica el horario europeo en Cataluña
La mitad de las que no lo han adoptado, lo harían si hubiera cambios sociales
El número de empresas catalanas que aplican medidas de conciliación ha aumentado desde 2007 a pesar de la crisis. Así lo demuestra un estudio llevado a cabo por el Ayuntamiento de Barcelona y el Observatorio Dona, Empresa i Economia de la Cambra de Comerç de Barcelona, que ha encuestado a 3.000 empresas para conocer la evolución de este tipo de medidas durante la crisis, conocer la opinión de las empresas sobre la reordenación horaria y descubrir el grado de aplicación del horario europeo en Cataluña así como los factores que lo podrían favorecer.
La medida de conciliación más presente en las empresas catalanas hoy en día es la flexibilidad horaria o la elección de turno después de una baja, aplicada por el 72%. A continuación se sitúa la reducción de la jornada, con el 57%, seguida por la excedencia por cura de familiares, presente en el 44% de las empresas. El teletrabajo y las ayudas monetarias o en especie para la cura de un hijo están a bastante distancia de las anteriores, con un 19,3% y un 11% respectivamente.
Desde 2007, la flexibilidad horaria y las ayudas monetarias o en especie son las que más han aumentado, con un crecimiento del 5,8% y el 5,2% respectivamente, seguidas por el teletrabajo, que creció aunque solo en un 2,4%. Sin embargo, la presencia de la reducción de jornada por cura de familiares en las empresas se ha mantenido estable, con un aumento de tan solo un 0,8%, una cifra insignificante, y el porcentaje de las que conceden excedencias por cura de familiares ha decrecido en un 8,7%.
El estudio también revela que cerca de la mitad de las empresas encuestadas está de acuerdo con que la europeización del horario laboral tendría efectos positivos. El 56% coincide en que los más beneficiados serían los niños, ya que mejoraría su educación y sus resultados académicos. A su vez, el 53% opina que la situación laboral de las mujeres también saldría beneficiadaal poder desarrollar su carrera profesional sin renuncias. Otros de los aspectos que mejorarían serían la productividad de las empresas, los negocios internacionales y el reciclaje profesional y la formación de los trabajadores, estando de acuerdo entre el 46 y el 48% de las compañías catalanas.
A pesar de la opinión favorable de las empresas, tan solo el 38,6% aplican el cambio de horario a toda o a una parte de la plantilla. Así pues, más del 60% de las empresas catalanas todavía no lo ha aplicado, aunque el 78,5% de ellas asegura que lo haría si se dieran cambios en la sociedad, la cultura de la empresa o no supusiera un aumento de los costos laborales. La mitad de las compañías que no aplican el horario europeo lo harían si se produjeran cambios relativos a los medios de comunicación, el sector público y la educación, entre otros. Un 26,6% si cambiara la cultura de la empresa, mientras que una de cada cinco accedería a implantarlo si con ello no aumentaran los costos laborales. Por contra, el 21,5% se niega a aplicar el horario europeo en cualquier caso.
El sector más abierto a este tipo de cambios es el de la industria, ya que el 56,6% de sus empresas ya aplican el horario europeo a toda o parte de su plantilla. No obstante, los más reticentes al cambio de horarios son los sectores de la hostelería, con un 70,8% de sus empresas que no lo aplican, y el comercio, con un 73,3% de compañías resistentes.
Éstos necesitarían medidas específicas de apoyo a la contratación para que la empresa no viera incrementados sus costes laborales totales y se fomentara así la adopción del nuevo horario. Un ejemplo de estas medidas seria la reducción de las cotizaciones sociales cuando se contrate a una persona en turno de mañana y otra en turno de tarde. Destaca también el sector de la construcción, con un 69,5% de sus empresas que no aplican el horario europeo.