barcelona al día

El arrojo de Trias con el dinero público

Un breve repaso a lo que la Cataluña oficial distrae de nuestros impuestos para la causa secesionista, y al fiscal Anticorrupción Pedro Horrach se le funde la calculadora de pedir penas al juez.

oti rodríguez marchante

Tal vez lleven razón los que opinan que las medidas del Gobierno contra la corrupción y que obligan a una mayor transparencia de la Administración General del Estado son insuficientes, pero da la impresión de que, ahora, el distraerle unos euros al erario público empieza a ser un deporte de riesgo. Vamos, que alguien sensato prefiere colgarse de un ala delta que pasarle una factura-menú a la caja boba de todos o que hacer un cursillo de creatividad fiscal. Menuda frase la del abogado defensor de Urdangarín, «parece que fuera un delito de sangre, como si hubiera cometido un asesinato». Diecinueve años pide el fiscal por los posibles delitos de malversación, fraude a la Administración, estafa pública… Por tal cosa, y tras leer la información que publicaba ayer María Jesús Cañizares sobre el alcalde Trías y su generosidad con el dinero público reclutando «voluntarios» para la independencia a diez euros la hora, uno no puede sino felicitar al señor Trías por su enorme valor al arriesgar, no ya nuestro dinero, sino su propia libertad en pro de su sueño independentista, que no por reciente es menos profundo y arrojado que el de, por ejemplo, Dyango.

Un breve repaso a lo que la Cataluña oficial distrae de nuestros impuestos para la causa secesionista, y al fiscal Anticorrupción Pedro Horrach se le funde la calculadora de pedir penas al juez. 340 millones para inyectar ilusión en los medios de comunicación que se los merezcan; casi 20 millones para embajadas y subidas de tensión catalanista; más de 6 millones en esa curiosa sensación de Tricentenari que nos sacará de pobres…, y una cantidad de dinero, que no deja de ser minucia para el erario, dedicada a la Plataforma ProSelecciones, donde se aprecia un productivo chorreo para disciplinas deportivas como el Futtennis, el Twirling, el Korfbal, el Tamborí, el Pitch & Putt o el Fistball… O lo que publicaba ayer Pablo Planas sobre el enjuague económico de la ANC con el Ayuntamiento de Trías y la pancarta con frase de camiseta que le pusieron a La Pedrera…

Ahora que llegan las Navidades y las bofetadas, con unos presupuestos que se ríen de las matemáticas y que ratonea el gasto social hasta vestirlo con pantalón de terlenka, siempre le queda a uno el consuelo de armar el belén (en casa) o federarse en Twirling, que es mover el bastón con gracia, pero no con ira.

El arrojo de Trias con el dinero público

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación