Cataluña quiere revitalizar su patrimonio histórico
La Caixa y la Generalitat se alían para rehabilitar seis de los principales conjuntos monumentales de Cataluña con una inversión de 1,9 millones de euros
La Obra Social de la Caixa aporta 1,9 millones al programa de la Generalitat para rehabilitar Empúries, Ullastret, Sant Pere de Rodes, Miravet, Vallbona de les Monges y la Cartuja de Escaladei dentro del plan «Patrimonio en Acción».
En el marco del yacimiento grecorromano de Empúries, el conseller de Cultura, Ferran Mascarell, concretó que el objetivo de este proyecto es «promover el uso de estos monumentos de una manera más cómoda, contemporánea y precisa, de manera que la gente identifique bien lo que hay detrás de cada uno de los equipamientos». El primer reto es obtener un incremento del treinta por ciento el número de visitas, tal y como ha sucedido con la iglesia románica de Sant Climent de Taüll, en el Valle de Boí (Lleida), después de una actuación conjunta también entre Generalitat y La Caixa.
«Es un repaso histórico; desde el mundo íbero de Ullastret, al grecorromano de Empúries, el feudal de Sant Pere de Rodes, el templario del Castillo de Miravet, la vida religiosa de Vallbona de les Monges y la relación entre equipamiento histórico y el vínculo con la tierra de Escaladei», añade Mascarell. «Todos son espacios vivos, que tienen que ver con nuestras inquietudes culturales y patrimoniales», asevera.
El director general de la Fundación Bancaria La Caixa, Jaume Giró, recuerda que este nuevo proyecto en común con la Generalitat sucede a los que anteriormente se dedicaron al Románico y a la recuperación de bodegas modernistas, con una inversión conjunta de 21,8 millones. «Es importante recordar y preservar la memoria –comenta Giró-. Y es fundamental su difusión».
Las actuaciones en Ullastret pondrán el valor el foso de la muralla y permitirán profundizar en la reconstrucción virtual de la antigua ciudad íbera. En Empúries, la parte del ágora griego se someterá a un proceso de reforma, al igual que una de las casas romanas que ejercía de almacén, tres mosaicos y el museo. En el caso de Sant Pere de Rodes pasará de monumento a conjunto con una señalización que enlazará el monasterio, el poblado y el castillo, mientras que Miravet experimentará también una mejora en su visita.
En el Real Monasterio de Vallbona de les Monges, un nuevo espacio explicará el sentido de la vida monástica femenina en su contexto histórico, y en Escaladei, la primera cartuja de la Península Ibérica, se continuará con la recuperación de zonas, que se completará con la restauración de una celda y de parte del sistema hídrico.