La Monarquía ya no es un problema
Seis meses después de la proclamación de Don Felipe, el porcentaje de españoles que consideran un problema a la Institución es «cero», según el CIS

La Monarquía ya no es un problema ni siquiera para el ínfimo 1,1 por ciento de los españoles, que así la consideraban el pasado mes de junio. Seis meses después de la proclamación de Don Felipe, el «cero por ciento» de los españoles ha incluido a la Institución entre sus preocupaciones, según el último barómetro del CIS, realizado entre el 1 y el 11 de diciembre con una muestra de 2.500 entrevistas.
La mejoría en la percepción de la Corona también se apreció en el barómetro de noviembre, cuando el porcentaje de encuestados que la consideraban un problema se redujo a un 0,3, pero fue en diciembre cuando desapareció como problema.
El paro se mantiene como primera preocupación para el 75,5 por ciento, seguido de la corrupción, que continúa en niveles muy altos (60 por ciento), aunque ha descendido respecto al mes anterior (63,8), cuando alcanzó su récord histórico. Después se sitúan la crisis (24,9) y los políticos en general (21). También ha dejado de ser un problema la ley del Aborto (0 por ciento). Curiosamente, el terrorismo internacional solo era el pasado mes de diciembre una de las principales preocupaciones para el 0,1 por ciento de los encuestados.
Menos separatismo
También el independentismo ha perdido terreno en España, un hecho que coincide con la resaca del simulacro de consulta que se llevó a cabo en Cataluña el 9-N. Solo el 8,9 por ciento de los encuestados defienden la posibilidad de que una Comunidad Autónoma pueda declararse independiente. Un mes antes eran el 12,4 por ciento. Por el contrario, los ciudadanos que prefieren un Estado con Comunidades como en la actualidad han pasado del 29,9 por ciento al 32,8 por ciento.
Los españoles son más optimistas respecto a la situación económica que sobre la política. El 22,5 por ciento cree que dentro de un año la economía será más positiva en España (19 por ciento hace un mes); solo el 15,6 por ciento piensa que la política habrá mejorado.
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