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La pizarra del Granada 0-0 Cádiz
16ª jornada
Punto cadista que sabe a mucho, viendo la trayectoria del equipo de Paco López, pero que muestra la sensación de que el cuadro cadista no está para mucho más ahora mismo
La crónica del Granada 0-0 Cádiz
Un punto y mucho es
Un empate en Granada ante un rival que viene de Primera, como tú, y que se encuentra en la zona alta tras recuperarse de un mal inicio, como quisieras tú, no debe saber mal para tú equipo, el Cádiz CF, que se plantó en Los Cármenes con la idea de sacar positivo y sí, lo sacó, aunque ahora mismo el sabor del empate siga siendo agridulce para un conjunto que sigue más cerca de abajo que arriba.
Esta podría ser el mensaje del dios fútbol a cualquier aficionado amarillo. Que su equipo no está ahora mismo para mucho más, irse sin daños de Granada y mucho es. Lo cierto es que el equipo de Paco López dio ciertas muestras de esperanza, a la hora de mostrar una aparente solidez que le hizo quedarse sin encajar goles, algo que no es poca cosa teniendo en cuenta que son muchos más los partidos en los que el Cádiz ha encajado que no.
El equipo supo sufrir, defender más o menos bien en determinados momentos y solo su inoperancia en los últimos 20 metros le privó no de marcar, sino de crear más ocasiones claras, pues si alguién hizo más méritos para ganar fue el Granada, las cosas como son.
El choque en Los Cármenes deja por un lado esa lectura positiva de síntomas de solidez, pero también la otra de un equipo que ahora mismo no está para mucho más. Parece aún lejano la posibilidad de encadenar dos victorias consecutivas y alejarse de la zona baja, siendo ésto último una prioridad urgente en un equipo que le siguen faltando cosas, sobre todo a nivel defensivo.
1. Fali, al lateral derecho
Salía el Cádiz con un once titular muy similar al que jugó ante el Córdoba. Finalmente Fali hacía de lateral derecho, mientras que Chust acababa a Kovacevic en el centro de la zaga.
El cuadro gaditano salía a contemplar un poco el devenir del equipo rival. Los minutos pasaban y el Granada comenzaba a dominar el choque. Fran Escribá sabía de los problemas en el lateral derecho de su amigo Paco y entendía que por ahí debía poner un puñar como lo hizo con Rodelas. El pequeño jugador nazarí encaraba una y otra vez a Fali pero, las cosas como son, el daño no eran importante como se podía preveer en ese duelo.
Los minutos del Cádiz eran malos, pues sufría. No le duraba apenas la pelota al conjunto gaditano y eso que protagonizó varios robos en campo de rival, sin embargo la toma de decisiones de los Brian Ocampo, Ontiveros, Carlos Fernández y compañía no era la más acertada en los metros finales.
2. Reacción amarilla
Pasada la tormenta y con el Cádiz indemne en el marcador, cambiaban las tornas del partido y el cuadro cadista comenzaba a llegar a la portería de Diego Mariño. El cuadro gaditano tenía sus primeras oportunidades en el partido, gracias a la fuerza de Ontiveros y Brian Ocampo, ya sea con lanzamientos desde fuera del área como el que también protagonizó Matos a la salida de un córner. El Cádiz se abría más ante un Granada que daba un respiro en su dominio territorial.
Sin cambios tras el descanso, el Granada se reactivaba y volvía a la carga. Escribá movía el equipo y metía a pesos pesados como Uzuni y el georgiano Tsitaishvili. Paco López tardaba en relevar a sus jugadores, viendo que el equipo aguantaba correctamente al Granada y sobre todo po rla pólvora de un Cádiz que sigue dependiendo en exceso de jugadores como Ontiveros y Ocampo.
3. Dar por bueno el punto
Pasados más de veinte minutos, Alejo entraba por un cansado Ontiveros, mientras el Cádiz estaba vivo en un partido en el que por momentos pasaban pocas cosas, salvo un mano a mano salvado por David Gil ante Diao. Melendo y Chris entraban por Ocampo y Roger, para posteriormente dar paso a Álex y Sobrino por San Emeterio y Carlos Fernández. Ya, antes de esos dos últimos cambios, el Cádiz había cambiado el sistema jugando con cinco atrás, tres en el medio y dos arriba.
Alejo y Matos eran los dos carrileros en la banda, con tres centrales, y por denlante jugaban Álex, Escalante y Sobrino, con Melendo más adelantado y Chris Ramos en punta.
El equipo cadista daba por bueno las tablas. El Granada casi que también, pero no por ganas, sino quizás por falta de fuerzas. El Cádiz no defendía mal, se mantenía en el partido y sabía sufrir. Aspectos importantes para al menos dar muestras de solidez y de fiabilidad, algo de lo que carece totalmetne este equipo. También con la sensación de que sigue muy por debajo de equipos a los que debería mirar cara a cara caso del Granada. Habrá que dar por bueno el punto, no queda otra, pero esto sigue siendo pan para hoy y hambre para mañana si el fin de semana que viene no se hace buena la igualada ganando en Carranza.
