Real Madrid - Cádiz CF
La pizarra del Real Madrid 0-1 Cádiz CF
Los amarillos le dan un baño de realidad, juego e intensidad a un equipo blanco noqueado desde el minuto uno al noventa de un partido perfecto del conjunto cadista
Cervera se come a Zidane
Si el mejor escritor de novelas del mundo hubiera pensado en un relato en el que un equipo recién ascendido podía ganar y apabullar al equipo con más Copas de Europa y reciente campeón de Liga, dicha novela sería de ciencia ficción como mínimo.
Pero el fútbol se basa más en la realidad que en lo imaginario y en Valdebebas un equipo, el de amarillo, le dio un baño de aúpa a otro equipo, de rosa aunque siempre de blanco, que no olió prácticamente la oportunidad de sumar puntos.
Álvaro Cervera no es tan conocido como Zidane pero el repaso táctico y de juego que el entrenador del Cádiz CF le dió a su homólogo del Madrid fue de aúpa. Cambiando variantes tácticas, manteniendo al equipo, haciendo cambios para refrescar al equipo y no para perder tiempo. La lección de 'cerverismo' que se llevó el Real Madrid será recordada durante mucho tiempo.
1. Dos puntas para hacer daño
Lo hizo Álvaro Cervera, jugó con dos delanteros en la casa del Real Madrid, para que luego le acusen de amarrategui. Cosa, ésto último que a Cervera no le importa en absoluto, pues como él mismo dijo: "Hemos ganado al Madrid porque hemos defendido bien".
Cervera apostaba por la velocidad arriba con Choco Lozano y el control de Negredo que hizo un partido antólogico. Con Salvi en una banda y Álex en la otra, los cuatros destrozaron la defensa blanca. Junto a ellos, una dupla soberbia formada por Jonsson y José Mari que fueron el timón de un equipo que arrancó el choque mandando, con ocasiones y aprovechando los espacios atrás.
La defensa cadista dejaba mandaba a gran nivel sin que jugadores como Isco o Vinicius pudieran desbordar. Trabajo enorme de un Carlos Akapo soberbio al igual que Espino.
2. Una goleada perdonada
El tanto de Lozano hacía justicia a un Cádiz CF que acumulaba ocasiones clarísimas ante un Real Madrid desbordado. Álex y Salvi cambiaban sus bandas, Negredo bajaba al centro del campo, y Lozano corría arriba. El centro del cambo robaba y ayudaba en defensa. Un partido perfecto.
Solo los errores arriba permitían dejar en duda un marcador demasiado corto para los méritos amarillos. Al descanso, Cervera suplía a un Lozano tocado y metía a Malbasic. El ex del Tenerife jugaba por detrás de Negredo aunque pronto se iba a la banda derecha para dejar a Salvi en punta de ataque buscando contras rápidas.
Por su parte, Álex seguía en la izquierda frente a su hermano Nacho. Akapo dejaba seco a Vinicius y la zaga cadista no sufría ante un rival que hacía hasta cuatro cambios en el descanso viendo un panorama desolador.
3. El Madrid aprieta pero no ahoga
La falta de intensidad blanca cambiaba en la segunda parte. El Madrid se metía en el partido pero lo hacía con acercamientos al área de Conan y sin peligro. Al Cádiz CF le faltaba tener algo más de presencia en ataque pero los amarillos seguían defendiendo bien.
Cervera movía el banquillo y metía a Garrido por un excelso José Mari, y más tarde a Augusto y Jairo por Álex y Jonsson. El esquema cadista del centro del campo hacía delantera era Garrido y Augusto, con Jairo en la izquierda, Salvi en la derecha, Malbasic y Álvaro Giménez arriba que entró supliendo a un gran Negredo.
Los amarillos se quedaban atrás por el empuje del Madrid pero los blancos no inquietaban de verdad salvo un disparo al larguero de Benzemá. Los fuera de juegos tirados a la perfección por la defensa, la intensidad y la calidad amarilla hacían el resto para lograr una victoria para la historia.