Osasuna - Cádiz
La pizarra del Osasuna 2-0 Cádiz
Los amarillos dan una pésima imagen sin ni siquiera generar una ocasión clara de gol en un partido con síntomas preocupantes de descenso
Síntomas de descenso
Horrible, pésimo y lamentable. Póngale el adjetivo negativo que quieran al partido del Cádiz CF en Pamplona. Un encuentro espectacularmente malo en el que el equipo de Álvaro Cervera ya estaba derrotado prácticamente al descanso cuando el equipo cadista perdía por la mínima.
El Cádiz no ofreció una mínima resistencia cuando se vio por detrás en el marcador. Se acabó el equipo cuando comprobó que Osasuna ya estaba por delante en el luminoso. Solo una ocasión en todo el partido y sin ni siquiera el pertinente 'uy' fue todo el bagaje ofensivo del conjunto cadista. Un equipo que se quiere salvar y que no encontró ninguna solución durante todo el partido. Rubén Sobrino en punta sin coger un balón, luego Arzamendia en punta tampoco. Osmajic y Andone con poca aportación. Nada de nada.
1. Buen inicio, mal desarrollo
Cervera sorprendía en el once titular con Rubén Sobrino en punta de ataque y Álex algo más retrasado. Ante las bajas, el técnico le daba la oportunidad a Arzamendia en el extremo con Chapela en la otra banda. El Cádiz salía con Fali de lateral derecho, Iza y Akapo no estaban , y realmente era un central más porque por muchos momentos Chapela se convertía en un lateral derecho más.
El planteamiento de Cervera era buscar velocidad arriba ante las pérdidas de Osasuna, pero no salió en ningún momento.
Los primeros minutos fueron de acercamientos amarillos al área rival con llegadas que acababan en saques de esquina que despejaban sin problemas la defensa local. El Cádiz salía bien plantado y aguantaba media hora hasta que Osasuna comenzaba a enchufarse al partido.
2. Cervera lo mueve todo
Dos ocasiones seguidas de Osasuna eran el preludio del primer tanto local. Una segunda jugada era el cúlmen de los fallos atrás del equipo amarillo. El Cádiz no ganaba una segunda jugada, todos los balones divididos eran de Osasuna y el equipo cadista no era capaz de dar dos pases seguidos.
Sergio Herrera, portero rojillo, era un espectador más y Osasuna se adueñaba del partido y ya del marcador. El Cádiz no daba señales de vida en la zona ofensiva, el equipo desaparecía totalmente del encuentro.
3. Bajada de brazos
Alejo entraba al descanso por Jonsson. Cervera colocaba al de Valladolid en la banda izquierda, a pierna cambiada, con Chapela en la derecha. Sin embargo, a la primera de cambio llegaba el segundo gol de Osasuna ante la preocupante debilidad de la defensa cadista. Un rol con un rebote en la cara era el síntoma de que el equipo estaba ya totalmente hundido. A partir de ahí, ni por amor propio, el Cádiz fue capaz de poner en mínimos aprietos a la defensa local.
Cervera lo cambió todo, metió en el campo a Andone, Osmajic y Bastida. Con Arzamendia muchos minutos en punta de ataque, sin cambiar absolutamente nada, el equipo amarillo acababa con Andone y Osmajic arriba, Alejo y Sobrino en las bandas, con Bastida y Alarcón en el centro del campo. Pero por nada de lo anterior fue capaz el Cádiz de acercarse no a un empate, sino al menos a demostrar que se quiere quedar en Primera División .