Pan y circo
El problema de Vizcaíno
'Donde el presidente ve una virtud, muchos vemos un gran defecto'
Dicen que no hay más ciego que el que no quiere ver y eso es lo que temo que le pasa a Vizcaíno. El sevillano dice destacar entre sus virtudes algo que muchos ven como su mayor defecto. Y claro, el problemón es gordo. Asegura que se considera una persona cercana a la calle, que cae bien, vaya. Pero me da que no es así. O no del todo. Más allá de que pueda caer bien a gente, faltaría más, me da que no cae igual en el resto de la plebe, esa a la que debe dirigirse como presidente de un club de fútbol.
Sobra decir que no sólo respeto a la gente que no cae bien, sino que incluso me resulta más interesante ya que está esta sociedad como para caer bien a ‘to’ quisqui... Dicho eso, Vizcaíno sospecho que es de esos que se creen tener gracia sin tenerla. Y claro, eso en Cádiz... Ya saben, el ‘age’ y eso... Eso sí, este lunes, por ejemplo, estuvo ‘sembrao’ sin querer estarlo. Fue cuando dijo que ojalá Contreras hubiera estado ocho años antes. Normal, es mejor recibir estopa de la buena entre dos que sólo uno como ha estado haciendo desde que llegó. Y lo dijo él, que se vanagloria de tener las espaldas muy anchas. Pues bien, este lunes se alegró que haya llegado otro que arrime el hombro. Y la espalda, también. Arte.
Vizcaíno se preparó bien la rueda de prensa, con su papelito y todo por si se le olvidaba algo. Estuvo bien, la verdad. Dio un perfil más bajo, más humilde. Qué menos; no está la cosa para sacar pecho pero siendo como es él se agradecen esas disculpas y ese amago de autocrítica.
Eso sí, ninguneó con altanería una pregunta en la que se le cuestionaba por el entrenador y si el club trabaja ya en analizar posibles sustitutos si el barco sigue yéndose a la deriva. «Si en la jornada cuarta respondo a esa pregunta me consideraría un presidente de Tercera», dijo con esa grandilocuencia suya que tan malas pasadas le ha jugado ya. Pues vale. Aunque -ojalá no- veremos en la sexta, que es hacia donde iba proyectada la pregunta de un periodista al que no se le caerían los anillos si hay que cubrir un partido de Tercera llegado el día.
Lo dicho, Vizcaíno estuvo bien y salvó la papeleta puesto que como ya ha demostrado cantidad de veces le va la marcha. Eso sí, debería cuidar ese problema que algunos vemos en sus formas.
P. D. Durante la rueda de prensa, Vizcaíno hizo lo que suele hacer y que un servidor no comparte en absoluto por respeto a los compañeros, a la audiencia y al contexto en general. Hizo una alusión personal y medio bromeó, que no debe porque no somos amigos, con que tengo un problema. Se equivoca el presidente porque no sólo tengo uno, tengo mogollón. Eso sí, entre ellos no se encuentra que me estén investigando en el caso Invercaria.