Cádiz Cf
Robert Navarro, de la ilusión al ostracismo
El extremo catalán ha pasado de deslumbrar en su debut en San Mamés a no contar para Sergio González en los dos últimos encuentros

El último día del mercado de fichajes aterrizaba en la Tacita de Plata ese jugador llamado a ser el diferente en el ataque. Aquel que demandaba Sergio González, las necesidades de la plantilla y la afición en unanimidad. Robert Navarro, que cierto es que no es un extremo derecho puro, llegaba al Cádiz para aportar su calidad y creatividad en la parcela ofensiva del conjunto amarillo.Y así lo demostró en su debut en San Mamés donde, desempeñándose por el costado diestro, deslumbró e ilusionó a la hinchada amarilla a base de regates y de mostrar una facilidad pasmosa para sortear rivales.
De hecho, aquella actuación de Robert Navarro fue la única noticia positiva que se llevó Sergio González de la visita amarilla al Athletic Club. Un jugador que se salía de los moldes habituales y que podía ofrecer unas alternativas inexistentes anteriormente en la plantilla. Sin embargo, las prestaciones que se le suponían al catalán se han ido diluyendo con el paso de las jornadas.
El futbolista se ganó la titularidad en San Mamés y Sergio lo colocó de inicio en la visita al Benito Villamarín. No tuvo demasiada incidencia, aunque estrelló un remate en el larguero que pudo haber sentenciado el encuentro antes de que Guido Rodríguez lo empatara a la hora de partido. Tres días más tarde, Navarro saltó desde el banquillo en el duelo frente al Rayo Vallecano para tratar de desatascar el empate y dotar a los suyos de más chispa e imaginación. Pero tampoco tuvo influencia y, de hecho, pasó desapercibido. Y claro, en un equipo que se caracteriza por su solidaridad y su fortaleza como bloque, o eres un futbolista determinante en el ataque o te tienes que mimetizar sí o sí con la ideología futbolística del entrenador.
Algo así como le puede suceder a Darwin Machis. Si tiene un día lucido en lo que a calidad ofensiva se refiere, su presencia en el once está más que justificada. Eso sí, si no es capaz de aportar lo que se le presupone, su presencia será una barrera para el bloque. Por eso, jugadores como Sobrino o Iván Alejo son tan valorados por Sergio González, porque a falta de acierto en ataque jamás van a negociar la brega y el trabajo en defensa.
Y quizás todo esto explica el motivo de la desaparición de Robert Navarro en los dos últimos encuentros. El técnico no ha contado con el futbolista ni en la visita al Metropolitano ni en la derrota ante el Girona en la última jornada. Y eso que en el duelo ante los de Michel el equipo necesitaba a un jugador que fuera de capaz de otorgar al equipo ideas para tratar de empatar el encuentro. Sn embargo, Sergio optó por otros perfiles de efectivos para dar caza a los catalanes.
Unos datos que se traducen en la necesidad de que Robert Navarro, cuanto antes, entienda cuál es la forma de jugar del equipo y, a partir de ahí, poder aportar su inagotable calidad en ataque. Un plan que ya se está ejecutando para que el aficionado cadista pueda volver a disfrutar del futbolista cedido por la Real Sociedad como en el duelo en San Mamés. El parón, sin duda, será un buen momento para ajustar piezas y mimetizar con el esquema al jugador sin la presión del campeonato liguero.