Málaga - Cádiz
Quino: «Me tocó vivir una etapa muy dura en Cádiz, pero allí me trataron muy bien»
ENTREVISTA
El que fuese jugador de Málaga (CD y CF) y Cádiz CF repasa su trayectoria en LA VOZ y CANAL AMARILLO antes del derbi
«Lograr una estabilidad en el fútbol es complicado, pero muchas veces te lo da la trayectoria. Eso le ha pasado a Ontiveros», señala
Cuándo y dónde se juega el Málaga - Cádiz
Los orígenes de Javi Ontiveros

Málaga CF y Cádiz CF se ven las caras este domingo a las 16.15 horas en La Rosaleda. Será un duelo andaluz muy disputado, de alto riesgo y con mucho en juego. Desde la distancia lo seguirá Francisco Cabrera Guinovart. Por el nombre y los apellidos no sonará mucho, pero al decir Quino ya la cosa cambia.
Debutante a sus 18 años en La Rosaleda con gol incluido en Primera ante el Osasuna en la temporada 89/90, a Quino le tocó vivir una etapa negativa en la Costa del Sol. Primero un descenso a Segunda, después quedarse a las puertas del retorno a Primera en el Estadio Carranza y, finalmente, un descenso a Segunda B de un CD Málaga que acabó desapareciendo.
De la Costa del Sol se marchó a Cádiz y tampoco mejoró el asunto. Dos descensos consecutivos enviaron al Cádiz CF de Primera a Segunda B, categoría en la que el malagueño estuvo su tercer año.

Futbolista hábil y buen regateador, Quino se marchó a Gavá para después volver a La Rosaleda y sí hacer historia (de la buena) con el nuevo Málaga CF. Un ascenso a Segunda y otro a Primera con Ismael Díaz Galán y Joaquín Peiró, respectivamente. Un equipo renacido con Roteta, Txomin Larrainzar, Agostinho, Movilla, Ruano, Rufete, Édgar, 'Chino' Zárate, Catanha... Deuda saldada con los suyos, que disfrutaron de él como nunca.
Recreativo, Badajoz, un periplo en Escocia con el Livingston (cuando esntonces no era tan habitual), de nuevo Gavá (con ascenso a Segunda B incluido) y Begues en su retirada. Un apasionado del balón que estuvo hasta superar la barrera de los 40 jugando al fútbol.
Un amante del balompié de antaño, del fútbol puro, de la esencia de este deporte. Sin tanto envoltorio, sin tanto espectáculo inclasificable. En definitiva, una persona cercana y muy agradable que siempre se queda con lo positivo.
- La primera pregunta es obligada: ¿qué fue de Quino?, ¿sigue vinculado al fútbol?
- No sigo vinculado al fútbol. Terminé de jugar con 40 años y alargué lo que pude porque siempre ha sido mi pasión y quise disfrutarlo. Luego estuve cuatro o cinco años en el pueblo siendo coordinador de fútbol base y entrené en Segunda Regional, al equipo femenino, al juvenil, pero me desvinculé.
- ¿Y lo echa de menos?
- No, para nada. Experimenté qué era tener un fin de semana libre a los casi 50 años y la verdad es que esto merece la pena. Ahora veo el fútbol como aficionado y así lo disfruto.
- ¿Reside ahora en Málaga o en Cataluña?
- No, no, no. Ahora vivo en Formentera. No me quedé en Cataluña ni regresé a Málaga.
- ¿Cómo se lleva estar tan alejado de la Costa del Sol?
- Pues son ya muchos años lejos de mi tierra. A los 21 años me fui a Cádiz y sólo volví a Málaga tres años y medio en otra etapa con el Málaga. Pero Málaga es mi infancia, mi adolescencia, el club de mi vida. No he vuelto porque la vida es incompleta y algo te tienes que perder. He dado muchas vueltas por España y también he vivido en Escocia. Por ahora estoy feliz en Formentera, aunque bajo a Málaga cuando puedo porque no me olvido de mi familia ni de Andalucía.

- No podrá estar este domingo en La Rosaleda. Juegan Málaga CF y Cádiz CF, dos de sus ex equipos. ¿Tiene alguna preferencia?
- A ver, han sido dos de mis equipos y les tengo muchísimo cariño, pero no dejo de reconocer que Málaga es la ciudad donde nací y conocí el fútbol. La Rosaleda es el estadio al que iba con mi padre de la mano a ver el Málaga, donde tuve el honor de disfrutar siendo un niño del Mundial 82, donde jugué desde los alevines hasta el primer equipo. Es el club en el que más completo me he sentido. Los dos últimos años allí fueron maravillosos, subiendo a Segunda y a Primera tras volver después de años complicados. Era cerrar el círculo y sentirme satisfecho conmigo y con los míos.
- ¿Y cómo recuerda su etapa en Cádiz?
- Guardo muy buenos recuerdos del Cádiz CF. Y eso que me tocó vivir un club desangelado en la etapa post-Irigoyen, un club que no tenía la pureza que tenía cuando yo llegué y olía todo a Cádiz. El grupo de Madrid estuvo en mi época y el Cádiz CF empezó a entrar en una dinámica muy complicada.
- Eso es. Fue una etapa muy turbulenta en La Tacita de Plata, con dos descensos incluidos. No le tocó vivir la mejor época, no.
- Exacto, me tocó vivir dos descensos. Uno a Segunda y otro a Segunda B en dos años consecutivos. Fue muy duro y complicado. Pese a ello guardo un recuerdo muy bonito de Cádiz porque después de desaparecer el Málaga, me acogió el Cádiz CF y pude volver a Primera. Siempre estaré muy agradecido a mis compañeros, a la afición, a lo bien que me trataron en Cádiz.
La famosa tanda de penaltis
- ¿Cómo se vivían en el césped estos derbis entre Málaga CF y Cádiz CF?
- Bufff. Siempre existió mucha rivalidad, pero somos dos equipos andaluces, siempre entre Primera y Segunda, aunque también en Segunda B.
- Usted estuvo como jugador del extinto CD Málaga en la eliminatoria que dejó al Cádiz CF en Primera e impidió subir al Málaga. Aquella famosa de la tanda de penaltis.
- Disputé todos los minutos de esa eliminatoria idílica para el Cádiz CF y trágica para el Málaga. Me hubiese quedado con los dos en Primera, pero sólo podía quedarse uno de ellos y fue el Cádiz CF. Aún se recuerda aquella famosa tanda de penaltis y el Cádiz CF siguió en Primera.
Nosotros no ascendimos, pero fueron partidos vibrantes, con dos aficiones muy pasionales, dos equipos muy acostumbrados a esos partidos tan decisivos de 'play off'. Se vivió mucho fútbol, unos recuerdos tremendos. Yo jugué con 21 años y la experiencia fue muy potente. Después, causalidades del destino, acabé en el Cádiz CF.
- Ha cambiado mucho el fútbol desde entonces, ¿verdad?
- Ahora tengo compañeros que son entrenadores, representantes... No quiero decir que cualquier tiempo pasado mejor, pero tengo la sensación que en el fútbol que viví la cercanía era mayor entre el aficionado y el jugador.
Entonces los aficionados podían acudir a los entrenamientos, se hacían muchas entrevistas, había polémicas, hablábamos sin ponernos la mano en la boca... Todo eso hacía que el aficionado sintiera más su club, estuviera más apegado a él, la pasión fuera más latente. Ahora se busca lo imposible para que todo sea perfecto y eso hace perder la esencia del fútbol.
Ahora se pretende que no haya polémica, que no existan goles injustos, todo está muy controlado y es muy artificial para que no se desestabilice al club o a los jugadores. Eso no es la realidad. Seguro que las peleas y las discusiones en los entrenamientos siguen existiendo, pero se trata de tapar todo.
Al final el aficionado queda relegado a tener la suerte de sacar un carné y ver un partido en el estadio o por la televisión. Yo lo veo un poco incompleto. Antes tenías relación hasta con los aficionados de los entrenamientos.

- Se han experimentado muchos cambios. ¿Qué le parece el VAR?
- Con el VAR es fútbol es más injusto. Soy un amante del fútbol, pero un gran detractor de dirigirlo todo al detalle, sin que pueda existir la espontaneidad, sin que existan fallos.
- También la relación entre los clubes y jugadores con los medios de comunicación es otra historia...
- Me niego a pensar que los periodistas sean los enemigos. Cuando te retiras y creces, pues te das cuentas que esos periodistas quieren también crecer. Vamos todos de la mano y si gana el equipo, también ganan ellos. Yo tengo buenos amigos periodistas y esa relación se forjó en aquellos años de fútbol. Respeto muchísimo su profesión.
Semejanzas
- Volvamos al verde. Usted que se curtió en el club de Martiricos y debutó muy joven con el CD Málaga, aunque triunfó a su vuelta, ¿cómo ve la progresión de su paisano Javi Ontiveros?
- A Ontiveros como paisano le deseo lo mejor, aunque este fin de semana no tanto porque mi Málaga está en el corazón. Él como jugador está a un nivel altísimo. Lograr una estabilidad en el fútbol es complicado, pero muchas veces eso te lo da la trayectoria. A él le ha pasado y ahora le está empezando a salir todo. Tiene un talento enorme. Repito: le deseo lo mejor.

- ¿Sigue teniendo contacto con Sergio Pellicer? Fueron compañeros en el Málaga y él también jugó en el Cádiz CF.
- Fui compañero de Sergio Pellicer. El año pasado lo vi en La Rosaleda. Además nos cruzamos mensajes de 'whatsapp' de vez en cuando. Ahora bien, intento no molestar, les respeto y deseo lo mejor. Hay que dar su espacio a los profesionales para cuidar una amistad. Más allá de eso siempre de alegría verle y notar que le apasiona lo que hace y que respeta mucho al club. Lo está dando todo. Es un gran profesional. Es el entrenador idóneo para el Malaga.
- A Málaga suele ir. ¿Y a Cádiz?
- A Cádiz voy menos de lo que me gustaría y el nuevo estadio no tengo el placer de conocerlo. Tengo muchas ganas de pasar por Chiclana porque allí están mis vecinos, Miguel y Pili, que fueron como mis padres y quiero verlos. Ellos fueron muy importantes para mí y siempre les voy a agradecer todo lo que hicieron por mí. Con ellos sigo teniendo contacto. Son extraordinarios.
También me encantaría volver a ver a Barla, Kiko, Chico Linares, Carmelo... Deportivamente no fue un buen paso, también he de reconocer que no estuve en mi mejor momento, pero me trataron muy bien y me quedo con eso. Cádiz es preciosa.
- ¿Algún pronóstico para este domingo?
- Mi corazón es blanquiazul y siempre he sido malaguista. Al Cádiz CF le deseo todo lo mejor. Que gane el fútbol, que sea un gran partido, una fiesta y exista respeto entre las aficiones. ¡Ojalá podamos volver a Málaga CF y Cádiz CF en Primera en un futuro!