El Mirandilla busca arrancar en 2024

Hace tiempo que el aficionado amarillo no puede estar orgulloso de lo que hace el filial. El Mirandilla navega por Segunda Federación con poco rumbo y, además, exporta una nula aportación a los intereses del primer equipo. En los últimos años, tan solo Momo Mbaye y David Gil se han asentado con los mayores, mientras que otros han llamado la atención sin demostrar en el campo que merecían la continuidad en la máxima categoría del fútbol español.

Alberto Cifuentes continúa siendo el líder del Mirandilla, que empató en su último partido del año frente al Atlético Antoniano. «Hay que disfrutar las vacaciones, venir la semana del 1 al 7 con la mejor predisposición, con un partido en casa contra un rival que está abajo también y a ver si acabamos la primera vuelta con 23 puntos. Ahora pensar en eso, que disfruten los chavales, trabajar esta semana que todavía tenemos trabajo, y cuando volvamos pues nos quedan cinco meses apasionantes», manifestaba el técnico manchego.

Y es que el filial del Cádiz no ha terminado de arrancar. Tras 16 jornadas disputadas ocupa la undécima posición en el Grupo 4 de Segunda Federación, tan solo dos puntos por encima de la zona de descenso a Tercera Federación y uno de distancia con el playoff de descenso. Eso sí, parece que el equipo se ha enmendado tras la humillante visita al Sevilla Atlético, donde los amarillos cayeron por cinco goles a cero en el marcador. Desde entonces han sumado nueve puntos de los 18 que estaban en juego.

Aún así, lo más preocupante es que no parece que los futbolistas que militan en el segundo equipo tengan nivel o proyección para estar bajo los mandos de Sergio González. Esta temporada, Diakité debutó de forma testimonial en Vigo, mientras que algunos de los hombres más destacados están repartidos en distintas cesiones. Tan solo Mwepu, que suma siete goles en Primera Federación, o Carlos García, en el Córdoba, parecen que pueden cumplir con ciertas expectativas. Álvaro Bastida tampoco ha encajado en el Atlético Sanluqueño y José Antonio de la Rosa no ha logrado explotar en el Recreativo de Huelva.

De la plantilla del Mirandilla no hay mucho a destacar de cara al futuro. Tan solo Alejandro Morata, central del 17 años, y Dani García, centrocampista de 20, demuestran una calidad superior a su categoría y, según su evolución, podrían tener un hueco en el primer equipo. Una realidad bastante triste para un filial que, a priori, debe nutrir a los mayores. Ojalá 2024 comience con nuevos aires para el conjunto que dirige Alberto Cifuentes.