Cádiz - Celta
Y con el Covid, ¿dónde da las charlas prepartidos Cervera?
CANAL AMARILLO desvela el rincón del estadio en el que el técnico da las últimas órdenes antes de saltar al verde de Carranza
Dónde y cuándo ver el Cádiz - Celta
Con esto del Covid, los vestuarios de los estadios han pasado a mejor vida, al menos, hasta cuando vuelva la ansiada normalidad. Si es que algún día vuelve porque con tanta prohibición ya establecida... El caso es que en el fútbol también han entrado normas severas en pos de frenar al virus y aunque la mayoría no se entienden y parecen más paripé que otra cosa, el caso es que durante este año se han visto y se verán imágenes insólitas como
las de compañeros abrazándose en el campo y otros con mascarillas distanciados por dos metros y medio en la grada o palco del estadio de turno.
Desde el primer momento en el que el coronavirus irrumpió en nuestras vidas, el fútbol se puso manos a la obra para legitimarlo aunque fuese televisado y sin público en los estadios.
Lo primero que se hizo fue desinfectar las gradas y toda la superficie que pudiera estar en contacto con el ser humano. Después el balón echó a rodar y los vestuarios quedaron sellados hasta nueva orden. Así, los equipos visitantes venían a Carranza ya vestidos de corto y para jugar y cuando terminaba el choque se dirigían a sus respectivos hoteles para ducharse.
En el caso del Cádiz, los jugadores acuden a la ciudad deportiva, donde dejan sus coches para dirigirse al estadio en los dos autobuses oficiales (por eso de la distancia social no pueden viajar solo en uno). Una vez jugado el encuentro de marras, vuelta a El Rosal, donde se duchan y ya retoman sus automóviles particulares y cada cual se va a su templo de manera individual.
Todo comenzó con aquel primer encuentro de la nueva vida, el del Rayo en Carranza que se empató con un gol de Álvaro Giménez. Aún era Segunda División, categoría que jugó sus once últimas jornadas sin público.
Ese día ya comenzaron los cambios y Cervera y los suyos tenían que dar la última charla técnica en una entreplanta de las gradas de tribuna. Sin módulos ni tabiques, los periodistas que acudian a la cita acreditados y con mascarillas veían (a su paso hacia los palcos de prensa ubicados en el palomar de Carranza) y escuchaban las voces de los entrenadores sin ninguna intimidad.
Así ha estado Cervera y sus muchachos hasta que hace un mes aproximadamente el club ha colocado un tabique, con su puerta y todo, para darle a los equipos mayor intimidad no solo frente a los medios de comunicación, sino básicamente entre ellos porque si los locales dan su charla en la cantina de tribuna más próxima a fondo norte, los visitantes la dan en la opuesta.
Y allí es donde Álvaro Cervera ofrece sus últimos comentarios a
ntes de saltar al terreno de juego de Carranza. Este domingo, tanto él como el Chacho Coudet, entrenador del Celta , tendrán de nuevo a su disposición un vestuario alternativo con baños pero sin duchas y una barra en la que más que cervezas y refrescos con frutos secos aparecerán anotaciones de las últimas órdenes tácticas de los cuerpos técnicos.
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