Cádiz CF
El ruido como objetivo y política de club. La cronología de una involuntaria pero ¿obligada? misión
Manuel Vizcaíno, atropellado por el error del VAR ante el Elche, intenta sacar rédito como sea de un error que puede marcar la temporada
Cuando se tiene un accidente menor, es una faena. Nadie lo busca y nadie lo duda. Pero si las lesiones no son devastadoras, cuanto menos hay que intentar sacar lo máximo por algo que te han hecho sin tú buscarlo. Y en esas ha estado liado Manuel Vizcaíno desde justo el momento en el que le confirman después del Cádiz - Elche que el gol de los franjiverdes es ilegal porque parte de una posición incorrecta de Ezequiel Ponce y que los árbitros del VAR -ni los del campo- han detectado.
El presidente del Cádiz CF deja pasar apenas una hora y decide hacer declaraciones. No es la primera vez que lo hace. Manuel Vizcaíno suele ser muy bravo en sus declaraciones cuando quiere, pero no las hace de manera desaprensiva. No. El empresario sevillano siempre suele dejar pasar un cierto tiempo antes de echarse al foso. No le gusta hablar en caliente, pero cuando lo piensa fríamente, entiende que debe salir en defensa de lo que es suyo y de los aficionados. Pero antes de ello, lee, consulta, escucha, discute y saca conclusiones antes de decidir con frialdad que lo que va a hacer es lo correcto.
Y sí, otra vez más, entiende que ha de dar el paso al frente . Como lo dio con la rueda de prensa, tocando la madrugada, tras el partido de Copa ante el Real Madrid en el de la alineación indebida de Sheryshev; o como cuando escribió y publicó la carta abierta tras la goleada en Anoeta que venía a agotar la paciencia del cadismo; o con la posterior que hizo tras los dos penaltis de Mallorca . Y como esos días el pasado lunes el presidente del Cádiz CF volvía a sentirse con toda la razón para hacer ruido. Y no sólo con su razón, también con la de los aficionados, que a medida que fue viendo el estado de cabreo e indignación que circulaba por las redes sociales entendía más si cabe que había llegado el momento de representarlos, ponerse el uniforme de hincha y que salga el sol por Antequera. Con todas sus consecuencias. Que las habrá.
Y vaya que si lo hizo. Vizcaíno no pierde tiempo y se hace la 'tourné' esa misma noche y aparece jurando en arameo en Canal Sur, la Ser, la Cope y todo aquel medio que lo pretendiera. Además, el hecho de que el encuentro cerrase la jornada y fuera el único que se disputó aquel día le viene como anillo al dedo a la estrategia del ruido porque toda la atención mediática de esa noche estaba en Carranza. Y así fue como todos los programas deportivos de la medianoche centran sus piezas editoriales, informaciones y tertulias sobre lo ocurrido en el encuentro celebrado en el estadio gaditano. Y todo, con las palabras de Vizcaíno encima de todas las mesas. La misión acababa de dar un gran paso en su objetivo.
Pasa la noche y sigue la indignación. Radio Marca se levanta con más declaraciones de Vizcaíno y en Onda Cero tiran de un listado facilitado por el Comité Técnico de Árbitros en el que los colegiados reprochan al Cádiz CF que se queje después de ocho errores del VAR que, según los de negro, beneficiaron a los gaditanos. Y no solo eso, se informa también que en la última jornada de Liga del curso pasado en Mendizorroza se deja pasar un penalti por manos de Espino. La guerra, lejos de apaciguarse, emprende un camino que habrá que ver si será letal o no para los intereses del Cádiz CF en esta campaña.
Por motivos de agenda, Vizcaíno viaja a Madrid ese mismo martes acompañando a Fitur a su vicepresidente Rafael Contreras . Pero no por ello se alejan de la actualidad y, por ende, de la misión. Ya en la capital de España, el presidente del Cádiz CF ofrece una breve entrevista a un reportero de Canal Sur con la que los informativos de la televisión andaluza abrirá su sección de Deportes. No será el único telediario que concederá al Cádiz CF importancia, los demás de ámbito nacional esparcen el ruido mediático originado por el error y potenciado por el mayor damnificado.
Esa tarde, la del martes pasado, el Cádiz CF informaba a las 19.42 horas y a través de su gabinete de comunicación que habría ruedas de prensa de dos jugadores el míercoles y el jueves. Algo insólito desde hace mucho tiempo en la que apenas habla un jugador a la semana y mucho es. Algo se estaba tramando y no era otra cosa que una nueva política de club, que parecía dirigida a alzar la voz a través de sus jugadores.
Sin embargo, apenas una hora después, a las 20.20 horas, el Cádiz CF volvía a hacerse con el eco del panorama futbolero del país y lanzaba un cohete en forma de comunicado. Impugnaba el partido y pedía que se reanudase desde el minuto 81, cuando marca el Elche tras un fuera de juego no detectatado por el VAR.
A sabiendas de que ya iban fuera de plazo para presentar alegaciones , Manuel Vizcaíno firma un comunicado que considera más importante que la fecha límite para presentarlo al argumentar que «dicha solicitud se fundamenta en lo que, a juicio de esta entidad, no puede tildarse de un mero error humano, sino de un grave y manifiesto error técnico arbitral, motivado por la actuación negligente y no excusable de los árbitros de la Sala VOR designados por la RFEF que, a criterio de esta Entidad, no sólo incumplieron las Reglas de Juego aplicables, sino que pasaron por alto la normativa vigente respecto a los principios y procedimientos regulados en el Protocolo VAR».
A pesar de que el recurso de impugnación realizado por el Cádiz CF está fuera de tiempo, el CTA considera contestar a la entidad gaditana aunque para hacerle ver que, en todo caso, no son ellos los que pueden decidir sobre el asunto ya que se muestran «incapacitados» para ello.
Este comunicado altera la agenda de comunicación del club, que a las 21-13 horas envía una nota a los medios de comunicación alertando de que se quedan anuladas las comparecencias en miércoles y jueves de los dos jugadores para quedar reducida a únicamente la del entrenador, que hablará el viernes como suele ser habitual.
Así pues, el ruido está hecho. La política de comunicación del Cádiz CF queda al amparo del último comunicado y de las palabras de su presidente, que pone el broche al día acudiendo al programa de mayor audiencia deportiva, El Partidazo de Juanma Castaño, donde sigue con su discurso frentista contra la Real Federación Española de Fútbol y Luis Rubiales.
En dicho programa, al presidente del Cádiz CF le informan del listado realizado por el CTA con el que se señala hasta ocho errore del VAR que han favorecido al conjunto de Sergio. Vizcaíno define a dicho informe como «el cuaderno de la señorita Pepis».
Pasa el martes y ya en miércoles se producen varias noticias originadas por el conflicto inicial. Así, se conoce el expediente que Competición abre al presidente del Cádiz CF por sus declaraciones en las radios apoyándose en una frase que Vizcaíno nunca ha pronunciado como es la de «nos han robado».
El ruido ya está hecho, el mensaje ha calado y la misión se ha cumplido. Ahora solo habrá que sentarse a esperar si el estamento arbitral le concede al conjunto gaditano más o menos respeto de que hasta el momento ha demostrado con los de Vizcaíno desde que volvieron a Primera División.
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