La prueba de fuego para Arzamendia

P.V.

12/02/2023
Actualizado 13/02/2023 a las 11:50h.

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La gran imagen ofrecida ante el Girona, con su correspondiente victoria, solo deja una noticia negativa en el Cádiz CF. La sanción que debe cumplir ‘Pacha’ Espino tras ver su quinta cartulina amarilla de la temporada abre una nueva oportunidad para Santiago Arzamendia, que esta campaña solo ha participado a base de minutos residuales y que tiene ante sí la ocasión de reivindicarse en un escenario como el Camp Nou.

El lateral paraguayo ha disputado 386 minutos repartidos en 9 encuentros este curso. Uno de ellos, el nefasto choque copero ante el Real Unión de Irún, en el que completó la totalidad del tiempo. En liga, únicamente ha partido de inicio en el duelo frente a la Real Sociedad en la jornada 2, en pleno huracán de inicio liguero, y ante el Real Betis, donde dejó algunos detalles interesantes en ataque, pero no convenció en tareas defensivas en el lateral izquierdo.

De hecho, el técnico catalán lo ha utilizado en la mayoría de sus participaciones como una figura de refresco y, normalmente, en la posición de extremo, formando una especie de doble lateral con ‘Pacha’ Espino. Así fue, por ejemplo, en Mestalla, donde el equipo necesitaba defender la ventaja que otorgó el tanto de Alcaraz con piezas de recambio.

Desde su llegada a Cádiz, Arzamendia no ha convencido ni a Álvaro Cervera, ni a Sergio González ni a la afición. Aterrizó el mismo verano que Tomás Alarcón, actualmente cedido en el Real Zaragoza, y no ha sido capaz de desplegar aquellas habilidades que llevaron al Cádiz a realizar una inversión por los servicios de un futbolista que despuntó en Cerro Porteño y que es prácticamente un fijo en las alineaciones de la selección paraguaya.

Algo que no ha logrado en el Cádiz. La fuerte competencia con Espino desinfla a un jugador que siempre ha cargado el debate posicional sobre sus espaldas. Y es que, a la vista de sus cualidades, su demarcación ideal sería la de carrilero, un rol que no existe en los planteamientos de Sergio González. Goza de buena zancada, desparpajo, capacidad de trabajo, buen centro y habilidad para sorprender. Pero no es un defensor nato ni un atacante lúcido en los últimos metros. Por eso lo del carrilero.

Ahora, con la sanción que debe cumplir el ‘Pacha’ Espino, Arzamendia gozará, salvo cambios tácticos de Sergio, de una oportunidad de oro en un escenario que se convierte en un escaparate mundial para los jugadores. Una más dentro de las que ha tenido en el Cádiz. Hasta el momento no ha sido capaz de convencer, pero la afición amarilla sigue esperando a la mejor versión del paraguayo.

No tiene otra opción natural el técnico catalán. Para prescindir de Arzamendia ante la baja de Espino, el preparador tendría que desplazar a alguno de sus efectivos. Por un lado, cambiar de banda a Raúl Parra o a Iza Carcelén, o bien colocar a un central en dicha posición. Algo que no parece factible en estos momentos. Por todo esto, el paraguayo gozará de una oportunidad de oro ante los ojos del mundo en el Camp Nou ante el FC Barcelona.

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