Cádiz CF
Preocupación por la rodilla de Salvi
El extremo estará dos días de reposo tras sufrir un esguince lateral interno en su rodilla derecha
No falla. A este Cádiz CF le ha mirado un tuerto. si hace cerca de dos meses fue Álvaro García el que brillaba con luz propia en Carranza al marcar un golazo al Nàstic para caer lesionado minutos después debido a una dura entrada de Eddy Silvestre, ayer, en Almería fue su compañero Salvi el que vivió una similar experiencia. El sanluqueño firmaba un doblete ante el conjunto indálico y minutos después recibía una entrada de Pozo por la que pedía la asistencia médica mientras se retorcía de dolor sobre el césped. Saltaban las alarmas, pero él mismo las apagaba un ratito después tras coger el balón y adentrarse con soltura en el área rojiblanca. No pasaba nada. La sensación era clara: había aprovechado el 'entradón' del rival para arañarle segundo al crono de un partido que iba 0-2 en el marcador.
Sin embargo, el sanlqueño seguía dando muestras de no estar del todo bien. De hecho, Cervera lo cambiaba y el jugador se iba ligeramente cojeando hacia el banquillo. Una vez terminado el encuentro, varios jugadores del Cádiz CF publicaron en sus cuentas de twitter la imagen familiar del vestuario celebrando la victoria. Abajo, tumbado y sonriendo aparecía Salvi con, ojo, un vendaje con hielo en su rodilla derecha.
Pues bien, ante todo prudencia. En una primera aproximación médica, el jugador sufrió una distensión de su rodilla como consecuencia del golpe recibido y que le ha motivado un esguince lateral interno por el que seguramente no entrenará hasta el jueves, una vez que entre hoy y el miércoles se le pueda hacer una resonancia que concrete lo que tiene.
El jugador viajó en el autobús de regreso con la rodilla vendada y debidamente medicado en un regreso que se prolongó hasta las cinco de la mañana. Ya en Cádiz, Salvi fue llevado a su casa en coche por el técnico Javier Manzano aunque en todo momento el jugador podía caminar sin dificultad a pesar del aparatoso vendaje.
Salvi no fue el único que ha llegado renqueante de Almería. También David Barral, que fue cambiado en el descanso, sufrió un pequeño pinchazo en el abductor y ante las molestias que estaba teniendo optó por comentárselo al entrenador para no seguir forzando. No parece que sus molestias musculares revista mucha gravedad aunque entre el martes y el miércoles se le hará una ecografía para evaluar el alcance de la posible lesión.
