(Previa) Y a todo esto, hoy toca fútbol

Puede que lo mejor que le pueda venir al Cádiz en estos momentos sea jugar ya ante el Celta. Esta noche, tan solo cuatro días después del repaso que le dio ante su hinchada el Athletic de Bilbao. Además, lo mejor es que el partido se celebra fuera, muy lejos de Cádiz. En la otra punta del país. Así que de categoría. Todo lo que sea para los muchachos de Sergio aislarse por completo del ambiente tóxico generado por su propia directiva es lo mejor para un equipo que no lo reconoce ni la madre que lo parió si se compara con el que hace tres meses logró una permanencia a base de buen fútbol, entrega, corazón y sacrificio. ¿Qué ha pasado en ese tiempo? Pues muy fácil, que el presidente se ha dormido en los laureles y el once de Sergio más que reforzado ha sido lastrado.

La campaña de fichajes ha sido un sonoro fracaso. A esto se le une que el equipo cuenta con la baja importantísima de un jugador sobre el que pivotaba el juego del equipo, Rubén Alcaraz, que se lesionó un par de días después de la fiesta de la permanencia jugando un partido con su selección catalana, que yambién manda ‘collons’. Será que era tanta la alegría en esos momentos que nadie en el club reparó en la trascendental importancia que tenía ese jugador. Daba igual, se pensó. Probablemente, pensando en que Sergio había reactivado a toda la plantilla tal y como demostró el brillante e histórico triunfo en Can Barça con un equipo plagado de suplentes. El caso es que muchos de esos, como Jonsson o Salvi, tampoco están ya. Y es que el equipo ha abierto más la puerta para sacar a gente que para meter. Un auténtico disparate que retrata la nula planificación deportiva que ahora paga el único equipo de la Liga que se ha colado como colista en la cuerta jornada y sin estrenar su casillero de puntos. ‘Ta’ bueno.

Pero ya se sabe que a los entrenadores no les gusta hablar de los que no están y que deben centrarse en los que tiene. Y en eso está Sergio, que este viernes en Vigo tratará de detener la sangría defensiva que arroja unos números deprimentes y que afloran siete goles en contra por ninguno a favor en los tres primeros partidos de la Liga. De todo ello, lo peor es que probablemente la mejor línea que se ha comportado hasta el momento es la defensiva, con Ledesma al frente. El tema tiene mandanga.

Y con lo que tiene, Sergio espera comenzar a reaccionar empezando con cerrar la portería . Para ello, es probable que cambie el sistema y lo deje en un 4-3-3- con Ledesma en puerta y Zaldua, Chust, Luis Hernández y Espino detrás. En la medular estarán San Emeterio, Alarcón y Álex; en las bandas Ocampo y Alejo y en la punta del ataque Lozano. Y ya que pase lo que tenga que pasar y acompañe la suerte. Crucen los dedos.