Dos carriles camino de la regularidad

La vuelta de Carlos Akapo le ha dado algo más de consistencia a la defensa del Cádiz CF, que sigue teniendo en el Pacha Espino ese verso libre con el que se puede ser más agreviso partiendo de zonas defensivas.

No puede decirse, aunque parece estar de moda, que Iza Carcelén atravesara un mal momento, pero sí que puede afirmarse que el que lo atraviesa es su compañero de carril, el internacional con Guinea Ecuatorial Akapo, que el pasado sábado ante el Celta manutvo un nivel muy óptimo.

A favor del ecuatoguineano está su frescura puesto que Iza ha sido más veces utilizado en Liga. El portuense, que fue uno de los cuchillos con los que el Cádiz CF quiso entrar en el área del Mallorca en el partido de la vergüenza sentía unas pequeñas molestias que han sido aprovechadas por Akapo para colocarse en el once. Y todo parece indicar que seguirá siendo un fijo el próximo encuentro en casa ante el Getafe.

Y es que Akapo le puede dar a la zaga esa seriedad y consistencia que Iza, por su estilo más ofensivo y con menos envergadura, no aporta de idéntica manera. Para colmo, la presencia del búfalo Espino en la otra banda hace que la retaguardia esté más confiada con un perfil algo menos ofensivo como el del capitán de Guinea Ecuatorial.

El ejemplo se vio este pasado sábado frente a un Celta que nunca estuvo cómodo ante un Cádiz CF que gozó de más llegadas al área rival. No era un partido fácil para los de Sergio, que desde el primer momento mostraron un respeto tremendo al once de Coudet. Un respeto que no se tuvo nunca a los anteriores rivales con los que se ha medido desde su llegada. No era para menos, el conjunto vigués llegaba a Carranza con la flechita para arriba y no era plan de jugarle de tú a tú. Al menos, durante los primeros 45 minutos ya que en la reanudación Sergio sí que levantó la mano para ver a Espino mucho más ofensivo. El uruguayo chutó una vez a puerta, en el lance que siguió a la ocasión de Lozano, y de estar más afortunado Idrissi en pase tras equivocada internada quizás hubiera podido llevar más peligro.

Por su parte, Akapo se sumó al ataque fiel a su estilo. Con moderación y cabeza, esa misma que usó para rematar en el último minuto un centro que desvió Dituro antes de dar con su puño en la cabeza de Alcaraz en otra acción que se fue al limbo.

Akapo y Espino, Espino y Akapo, dos laterales que Sergio empleará de manera sistemática en una recta final de Liga a la que llegan ambos con la motivación de acaparar muchas miradas. Tanto de dentro, como de fuera.