Cádiz - Real Madrid
Iván Alejo, denunciado por la Policía
El extremo del Cádiz CF será propuesto para sanción por presunta falta de respeto a un agente durante el Cádiz - Real Madrid
Las cuentas para la permanencia en Primera
La crónica del Cádiz - Real Madrid (1-1)
![Iván Alejo durante un entrenamiento del Cádiz CF.](https://s1.abcstatics.com/media/canal-amarillo/2022/05/17/v/ivan-alejo-entrenamiento-kF9B--1248x698@abc.jpg)
Muchas son las historias que han salido a la luz durante la visita del Real Madrid a Cádiz. El encuentro, que complica la permanencia del equipo cadista en Primera tras no poder conseguir la victoria ante el campeón de Liga, se desarrolló con numerosos incidentes.
La grave entrada de Hazard a Akapo (el lateral derecho del Cádiz CF terminó la cita lesionado) y la actuación arbitral de Mateu Lahoz (con el posible penalti no señalado a Fali en la última jugada del encuentro) fueron algunos de ellos. También el rifirrafe que tuvieron Iván Alejo y un agente de la Policía Nacional durante el encuentro, tal y como apuntaba 'El Día Después'.
Este percance de Iván Alejo con el comisario de Seguridad Ciudadana da lugar a que el extremo del Cádiz CF sea propuesto para sanción por presunta falta de respeto.
Una tarde de emociones en Cádiz. #ElDíaDespués pic.twitter.com/y8ROZd39Nc
— El Día Después en Movistar Plus+ (@ElDiaDespues) May 16, 2022
«Cabeza ahora», señalaba Iván Alejo en un lance del encuentro. El vallisoletano no pudo jugar al lesionarse días antes en San Sebastián ante la Real Sociedad y presenciaba en directo el encuentro a pie de césped, pero fuera del rectángulo de juego.
Fue entonces cuando tuvo el incidente con un agente de la Policía Nacional. «No es falta. Mano, hombre». Y de inmediato le pegó dos tortazos al banquillo donde curiosamente estaba apoyado el agente que le pedía «un poquito de por favor», apuntan desde 'El Día Después'.
Y es cuando Alejo, en plena tensión por lo que el Cádiz CF se jugaba en el envite, respondía: «Con lo que nos estamos jugando me vas a decir a mí esas mierdas. Me cago en...». Y acababa: «Eh, eh. ¿A quién vas a dar un guantazo?».
En resumidas cuentas, un episodio más en un encuentro marcado por la tensión. Con la permanencia en juego, los nervios estaban a flor de piel.
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