Cádiz CF
El Cádiz CF más coral se descubre
Sergio ha conseguido hacer de su once un equipo compacto que brilla sn necesitar individualidades
Apenas importa cómo se encuentren los rivales y de qué clase de rivales se traten, lo más importante, lo elemental, lo básico y primordial es que este Cádiz CF que Sergio ha construido ya no es una noria y ha pasado a ser en poco más de un mes en un conjunto creíble, fiable, sobrio y que juega al margen de las individualidades, que siempre ayudan pero no han de ser necesarias cuando lo que se trata es de sacar adelante los partidos que se endurecen, se complican, se enroscan.
Un claro, un magnífico ejemplo de todo lo dicho anteriormente es el encuentro que el pasado sábado el Cádiz CF jugó y ganó frente al Rayo Vallecano. Los hombres de Sergio, todos, dieron una auténtica lección de hacerse con los tres puntos desde una manera más que elogiable de hacerlo, en equipo, colectivamente. El Cádiz CF más coral se descubre en el momento más severo de la temporada.
Los puntos comienzan a valer su peso en oro y cuesta la vida sumar de tres en tres. Pues bien, este Cádiz CF ha acostumbrado a los suyos a hacerlo en su propio feudo, donde sumar nueve de nueve en las tres últimas jornadas disputadas en Carranza.
Y no. Ante el Rayo no destacó por encima de nadie ningún jugador. Puede que Fali, que estuvo imperial, pero no menos que todos y cada uno de sus compañeros que contribuyeron a una victoria que se atascaba con el rigor incuestionable de estar midiéndose a todo un Rayo Vallecano, que llegaba con la flechita hacia arriba y en el sexto puesto de una clasificación que por momentos se estrecha en la parte de abajo, ahí donde se encuentra el Cádiz CF, club al que todavía le pasa factura esas malditas cinco primeras jornadas que se tiraron al retrete de la competición.
Sin ser un equipo defensivo, lo cierto es que el Cádiz CF de Sergio ha conseguido forjar su juego desde la base, desde la defensa. Desde ahí, con un Fali increíble y un Luis Hernández no menos brillante, el equipo amarillo comenzó a hacerse con un partido largo, eterno. A esa unidad en la zaga se le unieron dos laterales que son todo corazón y pocos centímetros. Iza y y el Pacha Espino volvieron a salirse por los fueros y si el portuense secó al temido excadista Alvarito García, lo propio hiz el charrúa con Isi Palazón por su banda. El uruguayo, además, se permitió el lujo de asistir con un pase de NBA a Sergi Guardiola para que el delantero recién fichado consiguiera los tres puntos. Lo del ex del Rayo y Valladolid, entre otros, tiene un apartado al margen.
Y si una defensa cumple con nota lo hace gracias a una confianza impuesta desde unos metros más atrás. Y ahí estuvo otra vez Conan Ledesma , que si bien esta vez no tuvo apariciones estelares sí que supo estar, y de qué manera, en los últimos minutos dando una seguridad tremenda a sus compañeros cada vez que abandonaba la línea de gol para despejar cuantos centros llegaban al área gaditana. La línea ascendente de este portero no para.
Y de la primera línea de combate a la segunda, donde ha llegado un hombre con más galones que un teniente general del ejército de tierra. Su nombre no es otro que Gonzalo Escalante . Cómo no estará el argentino para haber sentado sin rechistar a otro hombre que perfectamente podría ser titular como es Álex Fernández. Pues bien, el ex del Alavés abronca a cada compañero cada vez que considera que ha de hacerlo por el bien del grupo. Por abroncar, abronca hasta a la grada de Carranza cuando entiende que no está animando como debiera. Y a todo eso aporta colocación, ritmo, sensatez y goles, pues lleva dos. Y claro, con este bicho al lado, el que irradia felicidad es Rubén Alcaraz , al que Escalante le allana el camino para que se convierta en este volante organizador que Sergio desea para su equipo.
Dentro de este once de gala trabajado por Sergio aparecen las bandas, con múltiples alternativas como son los casos de Alejo y Sobrino . Fue el manchego el elegido para suplir al lesionado Ocampo y el ex del Valencia volvió a dar un recital de trabajo solidario con el equipo. Y es que cuando se correr se trata, Sobrino aporta mucho más en labores de contención que su compañero el uruguayo. En cuando a Bongonda , pues depende del día, pero cuando está inspirado igual destroza las defensas contrarias como se convierte en el compañero deseado por Iza, ese que fue el sábado en el trabajo conjunto de frenar a Álvaro García.
Y arriba está dupla, los fichajes. Roger no está viendo puerta pero su trabajo es encomiable. Y en cuanto a Guardiola, pues sus goles ya van camino de haber servido para suar seis puntos.
Hoy por hoy, y con el permiso de Ocampo y dependiendo de dónde se jugue, este Cádiz CF inspira fiabilidad, confianza y solidez. Es de lo más coral y gracias a ello es capaz de vencer a todo un Rayo sin un alarde de individualidades. Sergio puede estar contento. Muy contento. Y el cadismo, con él.
