«Lucas lo ha dado todo pero fuera del campo pensaba en el Dépor y eso le ha impedido tener continuidad»

"Agua pasada no mueve molinos". Sergio ha tirado del refranero español para analizar la marcha de su mejor delantero, Lucas Pérez. Ya poco más puede hacer un entrenador que ha visto como casi de un día para otro se queda sin su mejor futbolista de cara a la visita a Mestalla.

"¿Qué os puedo decir?", pregunta el propio Sergio cuando le cuestionan por la ausencia de Lucas. "Es una baja sensible. Lucas apareció con un gran trabajo de todos para convencerle a nuestro proyecto . Ha hecho un trabajo espectacular. Este verano se abrió la posibilidad de la vuelta a su casa. Se especuló y al final se quedó pero es verdad que ese convencimiento a nivel de entrenamiento y juego ha sido así porque le encanta el fútbol y se olvida de todo", destaca el entrenador.

El técnico amarillo reconoce que no ha sido fácil la situación. "En el día a día tenía la sensación de que quería volver. Todo ha hecho que al final no esté con nosotros, es una baja sensible. Ha sido difícil gestionar a un jugador que su cuerpo y alma está en el Depor pero estaba volcado con nosotros. Creo que lo hemos hecho bien, nos ha dado situaciones buenas y ahora tenemos que apretarnos todos".

Sergio no ha obviado la entrega y profesionalidad del jugador pero sí ha reconocido que quizás no ha jugado tanto porque fuera del césped su corazón estaba en Galicia. "Quizás en algunos partidos no ha tenido tanta continuidad como en otros. Cada vez que entrenábamos lo daba todo y jugando, pero al final ese corazón y ese alma le insistía en jugar en el Deportivo y eso a lo mejor le impedía fuera del trabajo estar a plenitud con nosotros. Quizás todo eso le ha impedido ser más veces titular. Lo ha dado todo por el Cádiz, no le reprocho nada pero es verdad que fuera de los entrenamientos tenía la cabeza en el Deportivo", apunta el míster cadista.