Cádiz CF
Un gran fichaje para el mercado de invierno
La vuelta del mejor Víctor Chust sería una de las mejores noticias para el Cádiz CF
Aunque ha tenido minutos esta temporada, el central valenciano no ha demostrado la regularidad que ofreció el pasado ejercicio desde la llegada de Sergio al banquillo
Lesionado desde principios de noviembre, el zaguero tiene que hacer frente de nuevo a la rémora de las lesiones
El irregular rendimiento de los fichajes
Víctor Chust reconoce el toque de atención de Sergio González
A principios del pasado mes de julio el Cádiz CF hacía una apuesta clara y contundente por Víctor Chust, uno de esos jugadores que la temporada pasada se ganaron el derecho a continuar en Primera.
El Cádiz CF apostaba sobre seguro con el central valenciano, que había estado cedido por el Real Madrid. No era ni mucho menos una cara nueva, pero había que ponerlo todo sobre la mesa para hacerse con la propiedad del futbolista, ya sin la cesión como fórmula. Y así fue: cuatro temporadas era el contrato que vinculaba a Víctor Chust con los gaditanos. Hasta el 30 de junio de 2026.
Sobre el papel todos salían ganando. El Cádiz CF porque incorporaba a su plantilla a un central joven que había rendido a buen nivel en Primera y que además era del agrado de Sergio González. Había que hacer un esfuerzo y no se dudaba. Era de los primeros en llegar y la incorporación era muy bien vista. A fin de cuentas, aunque con Álvaro Cervera tuvo algunas actuaciones positivas, terminó de romper con Sergio.
Si ganaba el Cádiz CF, también lo hacía Víctor Chust. Y es que el internacional sub 21 con España seguía jugando en Primera, en el equipo en el que demostró sus virtudes y que para él es conocido. Dar el salto definitivo al primer equipo del Real Madrid era una opción realmente complicada, aunque él lo intentó con todas sus fuerzas. Lo mejor en este caso era rendir al máximo nivel lejos de Chamartín. Eso sí, con el club blanco guardándose el 50% de sus derechos en un posible futuro traspaso o regreso a la 'Casa Blanca'. Ahora no era el momento de estar a las órdenes de Carlo Ancelotti, pero quién sabe si en un futuro surge la opción. No sería el primer caso. Ni muchísimo menos.
Y, obviamente, tampoco salía mal parado el Real Madrid. El equipo madridista daba salida a un futbolista que no entraba en sus planes porque en el centro de la defensa cuenta con jugadores como Alaba, Militao, Nacho y el recién incorporado Rüdiger, además de Vallejo, quien apenas tiene minutos. Contar con Víctor Chust, por tanto, sería frenar la progresión de un activo que puede dar sus frutos en el futuro. Ya sea en el tema económico o quién sabe si en el deportivo. En el fútbol nada está escrito. El Real Madrid tendrá control sobre el futbolista y tendrán la alternativa de poder repescarlo siempre que lo consideren. Es una estrategia particular y muy utilizada en Concha Espina.
La rémora de las lesiones
La realidad, sin embargo, no es tan positiva como la de buena parte temporada pasada. Y es que el jugador formado en la cantera del Real Madrid no ha terminado de dar un golpe sobre la mesa para demostrar todo lo bueno que hizo el curso pasado desde la llegada de Sergio González al banquillo gaditano y hasta que se lesionó en la recta final del pasado ejercicio. Entonces fue una pubalgia la que se cruzó en su camino y le impidió llegar en óptimas condiciones a la recta final.
Este curso Víctor Chust no empezó bien. La recuperación física le hizo comenzar al ralentí. Ni él ni el resto del equipo cadista, a excepción del guardameta argentino Conan Ledesma y pocos más. De hecho, las derrotas se sucedieron en las primeras jornadas de la temporada y el Cádiz CF daba muestras de fragilidad defensiva, recibiendo goleadas durante los primeros compases de la competición.
A priori sí ha sido uno de los centrales titulares, formando pareja en el eje de la retaguardia con Luis Hernández, el defensa con más minutos, de largo, esta temporada. Con 851 minutos disputados, Víctor Chust ha superado a Fali, Momo y Cala, por este orden. Sin embargo, Sergio tuvo que darle algún toque de atención. Víctor Chust lo admitía: «Tenía razón, no he estado al nivel que se me exige».
E incluso ha estrenado su casillero anotador con los amarillos. Fue en la cita del Espanyol en tierras gaditanas, momento en el que aprovechó un error del guardameta visitante Lecomte para marcar uno de los goles del Cádiz CF en aquel 2-2 frente a los blanquiazules.
Sin embargo, y aunque ha tenido buenas sensaciones en determinados partidos, se espera más de un jugador con un futuro muy prometedor que debe ir dando muestras de su calidad en el presente.
Lesionado y en el dique seco desde que tuviese que abandonar el terreno de juego ante el Getafe el pasado 4 de noviembre, se espera su vuelta tras el parón. En principio su lesión en el recto anterior no es de gran consideración, pero es una dolencia que ya ha tenido en anteriores ocasiones. Sin ir más lejos, durante su último año en el Real Madrid Castilla. La rémora de las lesiones, por tanto, pasa factura.
Ahora el objetivo es que Víctor Chust se convierta en uno de los grandes fichajes del Cádiz CF en el mercado de invierno. Como sucedió hace un año. A fin de cuentas, el central valenciano es uno de los talentos de La Fábrica que sí ha podido brillar en Cádiz, algo que no han podido hacer Martín Calderón y Antonio Blanco (este último aún en la primera plantilla cadista).
El Cádiz CF necesita a Víctor Chust para crecer. Y Víctor Chust necesita seguir creciendo.
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