Cádiz CF
271 días después, el Cádiz CF ganó en su estadio
La afición por fin pudo celebrar la primera victoria de la temporada de su equipo como anfitrión
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El Cádiz CF era uno de esos pocos equipos de Europa que seguía sin conocer la victoria en su estadio esta temporada. Y no es que no lo intentara, pues en más de una ocasión estuvo a punto de conseguirlo.
Aquellos puntos que volaban de La Tacita de Plata ante Granada y Espanyol en el último suspiro impedían que los seguidores festejaran un triunfo con sus jugadores. Por no recordar esa cita hace dos semanas ante el Getafe (1-1) que no dejó los tres puntos en la capital gaditana por pura casualidad. Eran los caprichos del destino que impidió que la Copa del Rey, que tan buenos resultados ofreció, se celebrara allí. La frustración en estado puro para una hinchada fiel que nunca dejó a los suyos en la estacada.
271 días han tenido que esperar los cadistas para festejar un triunfo en su coliseo desde que el pasado 8 de mayo se consiguiera ante el Huesca (2-1). O lo que es lo mismo, 8 meses y 27 días de calendario. Entonces se logró en el Estadio Ramón de Carranza y con un Cádiz CF que ya había certificado su permanencia en Primera. Eso sí, con menos público del habitual en las gradas debido a la pandemia provocada por el Covid-19.
En resumidas cuentas, más de dos años han pasado desde que el Cádiz CF no ganaba en un estadio hasta la bandera, sin restricciones de aforo. Fue el 29 de febrero de 2020, poco antes del confinamiento. Entonces el rival era el Almería, el encuentro era de Segunda y el ascenso a Primera, categoría en la que actualmente milita el equipo gaditano, estaba a tiro. El resto ya lo conocen.
Y al fin el triunfo llegó. Lo hizo en una semana en ¿la maldición del nuevo estadio? llegó a las entrañas del propio club. Tanto que en las barandillas del estadio se daba la bienvenida al Carranza. Y puestos a buscar talismanes, sin el color amarillo y con el morado por bandera.
Todo eso queda como un mal sueño. El Cádiz CF, que cumple como foráneo, ya sabe lo que es ganar en su casa y con los suyos. Una comunión perfecta para hacer frente a lo que queda, que no es poco. Pero ahí están Sergio y sus hombres para hacer historia.
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