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Lucas Pérez y el Cádiz, los caminos vuelven a cruzarse
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El sábado el delantero del Dépor y su anterior equipo se vuelven a encontrar tras la marcha del gallego del cuadro cadista hace dos años, en lo que fue la muestra de que aún queda algo de pureza en este deporte
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Unos se van, otros vuelven y al final del camino todos se encuentran. Lucas Pérez se fue de un Cádiz de Primera División a un Deportivo de La Coruña de Primera Federación. Una locura por entonces. El sábado, el gallego volverá a Carranza con su Deportivo de Segunda División ante el Cádiz de Segunda División. La locura venida a mucho menos.
Porque el presente puede decir una cosa y el futuro otra. Lo que hace justo dos años parecía hasta una ofensa por el cadismo, aquello de dejar al Cádiz por bajar dos categorías y pedir marcharte de manera constante, ahora se presenta como la muestra de que quizás Lucas Pérez no estuvo tan equivocado como podía parecer y que sobre todo es el reflejo de lo que pasa a menudo en el deporte; un día estás arriba y al siguiente abajo. Los caminos de Cádiz y Dépor vuelven a cruzarse con Lucas Pérez como protagonista.
Sin la posibilidad de que el ariete gallego hable en estos días previos al partido del sábado, por aquello de las erróneas políticas de incomunicación de los clubes de fútbol, muchas miradas estarán puestas en el jugador que dejó enormes gotas de calidad con la camiseta del Cádiz CF. Mucho se estuvo hablando de que Lucas se quería ir, como así fue, pero lo cierto es que hasta un día antes de confirmarse que se volvía a Galicia el ariete cumplió y hasta marcó goles con la camiseta amarilla.
La historia de Lucas Pérez de amarillo comienza a mediados de la temporada 21/22, cuando en ese mercado invernal acababa la trayectoria de Álvaro Cervera en el banquillo del Cádiz CF. El gallego llegaba a tierras gaditanas tras una primera vuelta en el Elche bastante discreta. Fue aquel brillante mercado invernal con Rubén Alcaraz, San Emeterio e Idrissi, entre otros.
Fue un fichaje sobre la bocina y desde el primer día se vio que el ariete le podía dar mucho a un Cádiz que fue toda la segunda vuelta, con Sergio en el banquillo, en el filo de la navaja hasta que logró la permanencia en Vitoria. Lucas fue titular y suplente, pero su aportación fue clave. Para el recuerdo dos de sus tres tantos: el del Camp Nou convirtiéndose en la primera y única victoria hasta el momento del Cádiz ante el Barcelona en su feudo y por supuesto el marcado en el Sánchez Pizjuán, aquel golazo de falta a la escuadra que permitió al conjunto amarillo sacar un punto en la recta final de temporada.
Tras lograr salvar al equipo, ya en ese verano dejó claro que se quería volver a La Coruña. Tenía una promesa del presidente referente a su salida y de ahí aquella reunión famosa con Manuel Vizcaíno en Zahara de los Atunes. Por entonces, el Deportivo ya apretaba y se dejaba querer pero el millón de euros invertido por el Cádiz en su fichaje hacían inviable que el cuadro gallego hiciera frente a dicha operación.
Era difícil retener al futbolista, ansiado por ayudar al equipo de su vida en la lucha por el ascenso, sin importarle el dinero ni seguir en Primera División. La muestra de pureza del fútbol protagonizado por un jugador distinto. Lucas siguió de amarillo y jugó la primera vuelta de la temporada 22/23 marcando otros tres goles en Liga y uno más en Copa del Rey.
Hasta el penúltimo día que estuvo en el Cádiz jugó y marcó, logrando el tanto del empate en Carranza en un partido ante el Almería. Era prácticamente fin de año y tras semanas hablando del 'caso Lucas' el jugador se marchaba al Deportivo. Amor por el club de su tierra que valía más que jugar en dos categorías menos.
Y tras temporada y media en el cuadro gallegó logró ascender a Segunda División. Sus 15 goles la pasada campaña bien valieron un descenso que coincidió con el descenso cadista. Visto lo cual, este sábado se vivirá el reencuentro de la afición gaditana con un jugador que, sin estar demasiado tiempo en el Cádiz, dejó su huella. La profesionalidad de Lucas Pérez quedó fuera de toda duda y eso quizás es lo que tendrá en cuenta buena parte de la hinchada amarilla cuando el sábado salte al terreno de juego del que fue su estadio hasta hace bien poco.
