Cádiz CF
¿Por qué Chris Ramos celebra los goles como los celebra?
El delantero se lleva las manos a las orejas, dibuja una M y dispara como si llevase dos pistolas en sus manos
Cuatro goles anotados y tres penaltis provocados en seis partidos. Increíble. Increíble sería una buena palabra para describir lo que está haciendo un delantero que llegó de Segunda y que ha tenido que ser otra vez en Segunda donde se está empoderando de nuevo. Y con mayor fuerza aún.
El gaditano está siendo el reclamo de los medios en estos días y es normal. Aunque la semana pasada recibía el premio al mejor jugador del Cádiz CF de la temporada pasada de manos de Radio Cádiz, en esta ha sido objetivo de los medios oficiales de su club.
El Zlatan de la Laguna ha sido protagonista de 'La crónica cadista', una sección de los distintos canales de comunicación que tiene el Cádiz CF. Ha sido ahí donde el ex del Lugo ha reconocido estar «muy contento y con buen sabor de boca después de la victoria en Cartagena«. Y no solo por él, también «por el equipo, por mí, por poder estar ayudando y por la victoria del equipo fuera de casa; es muy complicado ganar, es la segunda victoria consecutiva fuera de casa y hay que valorarlo».
Al ariete gaditano se le preguntó por el doblete conseguido en Cartagonova. Explicó el primero, el que se guisó y comió él solito tras aprovechar la empanada del defensa Jorge Moreno. «Como siempre, intento luchar cada balón hasta el final, hasta que sale fuera, no es falta..., hasta que no se para el juego. Intento lucharla y hacer el control para dentro del campo, una vez ahí intento finalizar y, afortunadamente, salió bien». En cuanto al segundo no tuvo más remedio que acordarse de su socio. Eso sí, también destacó «la altura máxima a la que soy capaz de saltar, pero el juego aéreo es uno de mis puntos fuertes. En el segundo gol Iván Alejo me puso un caramelo y, afortunadamente, pude rematarlo y hacer el segundo gol».
A diferencia del pasado curso, donde celebraba los goles de manera enérgica, alegre, sin ensayar, en esta ocasión ha comenzado a celebrarlo llevándose las manos a las orejas, dibuja una M y dispara emulando que lleva un par de pistolas. «En mis celebraciones, las pistolas son por Roger Martí, tenemos muy buena relación y nos apoyamos mucho dentro y fuera del campo y ahora que está lesionado y pasándolo mal porque no puede ayudar al equipo, mis goles están yendo a él porque confiamos mucho el uno en el otro mutuamente. También hago una 'M', por mi amigo Marco, que ya no está malito y, afortunadamente, ha superado la enfermedad que tenía. Por último, me tapo los oídos en señal de 'oídos sordos'». En este sentido, explica que va «cambiando las celebraciones porque tengo mucha gente que me quiere y que me dice que voy a marcar y, si meto, le dedico el gol. Si Dios quiere, seguirá habiendo multicelebraciones».
Y por supuesto, lo que nunca cambia, es su mirada al cielo mientras lo señala con sus dos dedos índice apuntando alto para acordarse de su querido abuelo, fallecido hace ahora un año.
Ya más en general, el ariete habla de la situación que se vive en el vestuario tras la última victoria. «El ambiente en la plantilla está muy bien. Si algo bueno tiene este equipo es eso y el grupo humano que estamos creando y, con la victoria, todo se ve mucho mejor. La gente está muy contenta, con ganas de que llegue el sábado y conseguir la primera victoria en casa, que nos hace mucha falta».
La llegada de Paco López al banquillo gaditano es algo que le parece «genial» a Chris Ramos, que argumenta su opinión. «Ha sido una gran apuesta del club y un gran acierto, porque tanto Paco como sus ayudantes son maravillas de personas y unos grandes profesionales. Desde que llegaron, a mí en particular, tanto Paco como el staff me han dado mucha confianza y lo único que me han dicho desde el primer día es que voy a ser un jugador muy importante, que tengo mucho potencial. Obviamente, tengo muchas cosas que mejorar y estamos trabajando en ello».
Por último, aseguró no pedirle «nada» a la afición. «Ellos saben lo que tienen que dar, que tienen que ir al campo con confianza, con orgullo y creyendo en nosotros. Todos queremos el mismo objetivo y luchamos por ello. Si estamos unidos y vamos de la mano a nosotros nos dan la vida, nos da ese plus que necesitamos y estoy seguro de que, si vamos juntos de la mano, todo será más fácil».