Cádiz CF
El Cádiz CF, Garitano, dos fichajes y un destino
El mercado de invierno sigue sin generar más noticias para un entrenador que, dependiendo de lo que le traigan, marcará un nuevo límite o no
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Más de veinte días de mercado y del Cádiz CF se ha ido un jugador (Iván Alejo) y han venido dos (Iker Recio y Mario Climent). Poco para lo que se pensaba o mucho para los que no creían mucho en este mercado de invierno tras ver lo desilusionante que fue el último que se dio en Primera División con el equipo en caída libre. No, se va a hacer muchos esfuerzos para reforzar una plantilla que viene de la elite y que se sobrentiende que está más que preparada para atar la permanencia.
Garitano se lo huele desde que puso un pie en Carranza y tan pronto como pudo abrió la boca todo lo que no la abrieron sus antecesores. «Necesitamos algo más», dijo varias veces y después de poner sobre el tapete de Carranza ante el Levante a tres canteranos (Diakité, De la Rosa y Borja Vázquez). El vasco, además, habla desde el crédito que le dan los cinco encuentros que lleva dirigiendo a un equipo al que parece haber sacado de la depresión en la que se encontraba. Lo que es seguro es que, de momento, lo ha sacado de los puestos de descenso, con los que ha puesto seis puntos, que son siete, de diferencia.
Lo que parece claro es que este año no hay prisas por ascender, aunque eso lo dejará claro el presidente Manuel Vizcaíno tan pronto se cierre la persiana de los fichajes de invierno. Tal y como comenzó la temporada, salvar el ejercicio en Segunda se puede dar hasta bueno dentro de las cabezas más racionales de un club que, si se mira bien, debe saber que no tiene plantilla para subir. Nunca la tuvo. Los fichajes de Caro, Matos, Glauder o Kavacevic no venían para reforzar sino para hacer lo que están haciendo, rellenar. Y eso parece llevar una continuidad con la llegada en enero de dos jugadores procedentes de una categoría inferior como es la Primera RFEF.
Las ideas claras
Ha tenido que venir una persona del norte para señalar el camino y la meta actual de este Cádiz CF. Y es que Garitano no se mordió la lengua al comienzo de año al señalar que ahora mismito este equipo no está capacitado para más que la permanencia. Sí, se acaba de ganar 1-4 en el campo de un rival directo por la salvación pero si se echa un vistazo a los primeros veinte minutos las razones se van al barco del entrenador vasco, que ve un mundo todavía por delante para terminar de pulir su nuevo equipo.
Aunque, de momento, sus pupilos están salvando los muebles es más que de recibo que no solo le escuche la afición, también la directiva. Y si Garitano pide habría que hacer todo lo posible para concedérselo. Y ojo, no para intentar cotas mayores como 'play off' y demás, no, sino para seguir amarrando una permanencia que ahora se ve fácil pero que puede comprometerse en el caso de que el trabajo en El Rosal y los resultados decaigan por falta de un objetivo ilusionante. Este club y su historia tiene muchísimos ejemplos que se pueden poner. Sin ir más lejos, el curso pasado parecía encaminarse con tranquilidad dado que Almería, Granada y, al principio, Celta se empeñaron en tirarse al mar cargadito de rocas. De ellos tres despertó el Celta, que aprovechó que en Cádiz se estaban haciendo las cosas tan rematadamente mal que incluso consiguieron bajar en una de las Ligas donde la permanencia fue más barata. Por eso, para que no se vuelva a repetir esa relajación manifiesta que se dio en el club la temporada pasada, Vizcaíno está obligado a darle a su nuevo entrenador ese salto de calidad que le está pidiendo para no pasar apuros de ningún tipo.
Lleva poco pero se ha percatado de cómo funcionan las cosas por aquí. Puede que por eso, Garitano se haya olvidado de que le vayan a traer un mediocentro de garantías y está aprovechando el regalo escondido que se ha encontrado en la figura de Moussa Diakité. El mediocentro africano ha sido rescatado por el técnico vasco y todo indica que su aparición en el once no es flor de un día. Además, se espera, se desea, se trabaja y hasta se perderá dinero con tal de que los peleones Alarcón y Koaumé se vayan con viento fresco antes de que acabe el mes. Escalante seguirá quedándose junto a Alcaraz, Álex, San Emeterio y Diakité como mediocentros. No está mal.
Por tanto, las presiones de Garitano a su directiva se van a centrar en la banda derecha, donde Alejo ha dejado un vacío en la posición de extremo diestro puro y en la delantera, donde Carlos Fernández sigue poniéndose a punto, aunque sin muchos resultados, para que la temporada que viene pueda regresar a Primera División con la Real, club que le hizo el favor al Cádiz CF de cederlo a coste cero. Y los favores, se pagan.
El destino ahora mismo no hay otro que salvar la categoría sin agobios de ningún tipo. Sí, es cierto, la Segunda es eterna y quién sabe qué puede ocurrir si los de arriba se desinflan y la maquinaria de Garitano comienza a coger velocidad, aunque para ello Vizcaíno deberá traerle piezas del primer mundo.
