Fichajes Cádiz CF
Rubén Sobrino vuelve a casa
El Cádiz CF se hace con los servicios en propiedad del ya exjugador valencianista, quien ya jugó como cedido en el equipo de Cervera el pasado curso
El manchego llega libre y firma por tres temporadas con los amarillos
Así ha sido el paso a paso del regreso del atacante manchego al club cadista
Mucho se ha hablado en los últimos meses de la vuelta de Rubén Sobrino al Cádiz CF. Ahora, justo al final del cierre del mercado, se ha hecho realidad. Y en propiedad, sin cesión como antaño. No sin emoción, pues el culebrón del verano era algo que se intuía desde el primer minuto.
Llega libre, a coste cero y firma por tres temporada. Eso sí, el Valencia se asegura un porcentaje en el futuro por objetivos conseguidos y en caso de venta del Cádiz CF.
Ya se cocinó a fuego lento el pasado mes de enero su llegada al club cadista, entonces cedido por el Valencia. Ahora no iba a ser de otra manera con dos clubes, el valenciano y el gaditano, defendiendo sus intereses hasta el final.
Ni que decir tiene que Sobrino era una de las peticiones de Álvaro Cervera para la temporada que ya ha empezado. El atacante manchego estaba marcado como prioridad tras adaptarse de manera inmejorable a Cádiz y al Cádiz CF y su estilo de juego. Desde el primer momento supo entender el concepto del míster y eso le hizo ganar puntos.
También es de sobra conocido que el Cádiz CF era la opción deseada por Sobrino. Y es que en La Tacita de Plata volvió a sentirse un futbolista muy útil el delantero de Daimiel. Fue ahí, en menos de seis meses, donde recuperó su mejor nivel, el que demostró años antes en el Deportivo Alavés.
Estrategia de desgaste
La operación no ha sido sencilla y ha durado desde que Sobrino regresó a Mestalla por cuestiones de contrato. Nada más salir de Cádiz su regreso era una prioridad. Por mucho que el presidente Manuel Vizcaíno dijese a las primeras de cambio que era jugador del Valencia y no vendría. Aquello fue a principios del mes de junio y desde entonces han pasado muchísimas cosas. Parecía descartado pero nada estaba más lejos de la realidad. Pura estrategia de mercado. Una opción de desgaste por una y otra parte (el club che quería sacar tajada al conocer el interés del Cádiz CF en el futbolista), que al final estaban condenados a entenderse. Incluso con elementos externos que podían cambiar el decorado como la opción del regreso de Manu Vallejo, por una parte, y con la polémica 'Cala-Diakhaby' como telón de fondo en algún momento.
Como también era estrategia que Álvaro Cervera comentara justo antes de recibir al Osasuna que el mercado de fichajes estaba cerrado. Era la línea marcada por el club y el entrenador (como es lógico) la seguía. Pero Sobrino seguía estando en la mente de todos.
Al final Sobrino vuelve a casa tras mucho tiempo de negociación (con sus idas y venidas) en la que se jugó con fuego. Y es que el atacante supo conforme avanzaba la pretemporada, y así se dejó claro en el inicio de la temporada, que apenas iba a tener minutos en el Valencia de Bordalás si todo iba tal y como se esperaba. Su apuesta en ese caso era continuar trabajando y dejar pasar el tiempo hasta que se abriera la siguiente ventana del mercado de fichajes en el mes de enero. Ya lo había avisado en su momento.
Arriesgada apuesta que podría dejar a Sobrino medio año sin protagonismo (en el caso de salir en el mes de enero) o incluso una temporada (si saliera en enero de Mestalla). Eso sí, con la certeza que el próximo 30 de junio de 2022 sería el manchego el encargado de elegir su destino, ya desvinculado del Valencia. Y ahí podría llegar libre al Cádiz CF. Ahora bien, con muchos meses por delante y la intranquilidad de saber lo que puede deparar el futuro. Sobre todo en el mundo tan ficticio como es el del balompié actual.
Eso no sucedió y es ahora cuando al fin puede decir Sobrino que es jugador del Cádiz CF a todos los efectos. Y así, Álvaro Cervera ya cuenta con su hombre deseado para la delantera.
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