"Ellos han demostrado que es posible". Álvaro Galán respira con orgullo cuando se le pregunta por la actuación del cuarteto 'Inclusión o victoria', que rozó el pase a cuartos de final en el Concurso de Carnaval del Teatro Falla. El grupo está compuesto por varias personas con distinto tipo de discapacidad, desde la física e intelectual a trastornos como autismo y bipolaridad. Se subieron a las tablas y completaron una magnífica actuación, ovacionados por un público que agradece tanto amor y cariño por la fiesta.

La idea de concursar con una agrupación surgió en 2020 con el cuarteto 'Merda Merda, mucha merda' y "es que era un reto", recuerda Galán. "Yo personalmente trabajo con personas con discapacidad. Soy educador y, al ver su talento y ser, además, un gran aficionado al Carnaval, me propuse este objetivo. Queremos que haya un referente en el mundo del carnaval, que no existía hasta este momento".

El Carnaval es de todos. "Y hay muchas personas con discapacidad que son aficionadas al carnaval, pero no tienen ese espejo en el que mirarse. Me recuerda mucho a lo que le ha podido pasar a las mujeres, y es que hasta hace hace pocos años prácticamente no había ninguna sobre las tablas. No existían esos referentes que ahora ya sí se tienen". Hasta contaron con un refuerzo de lujo. El Coñeta, gran chirigotero del grupo de Cascana, fue un fichaje de última hora. "Le pedimos la colaboración y al, ver el cuarteto en escena, pues le gustó. Nos dio enhorabuena y surgió la posibilidad. Para nosotros es un referente en el mundo del Carnaval para las personas con movilidad reducida; se sube al escenario y engrandece la agrupación. Es como fichar a Cristiano Ronaldo".

En esta segunda actuación se han consolidado, si bien no podrán olvidar ese estreno con el primer cuarteto. "Nos sobrepasó a todos", reconoce. "Era la primera vez y ver cómo en Andalucía y en toda España nos llamaron pues nos hizo sentirnos muy orgullosos. Recorrimos todo el país y derribamos muchas barreras", defiende. Por eso se propusieron regresar para ir adquiriendo veteranía y soltura.

"Mi reto era que tuviera continuidad para poder coger experiencia, porque este cuarteto tiene un estilo propio que busca emocionar, que busca hacer reír... con el tiempo ellos iban a ir ganando veteranía y seguro que la propuesta mejoraría, pero surgió la pandemia y por eso no hemos vuelto hasta cinco años después. También mi idea era abrir el grupo". Álvaro Galán participa en la Asociación de Artes Escénicas y Educativas, de donde se nutre para darle desarrollo a este cuarteto.

"Empezamos en Afanas, pero nos llegaron muchas propuestas de diferentes aficionados de de la provincia y hemos querido contar con varios de ellos. Incluso los figurantes son de la Fundación Genuine".

Son mil dificultades. Es muy complejo sacar una agrupación de calidad en el Gran Teatro Falla y más con todas las circunstancias. Para colmo, se torcieron mucho las cosas a dos semanas del estreno en el Falla. "Llevábamos todo el año trabajando, desde el pasado verano, en una obra creativa. Y a una semana del ensayo falleció mi madre. También Sergio, uno de los integrantes, tuvo un accidente grave y no podía salir. Los chicos se desmoralizaron, pero por suerte operaron a Sergio y todo salió bien. Un compañero tuvo que sustituirle, ensayamos día, tarde y noche y defendimos la actuación". Una espinita que pudieron quitarse después de la buena actuación. "Acabamos muy contentos. Nos habría gustado darla completa con todo el grupo y disfrutar con nuestro Sergio en escena. Pero bueno, antes de salir nos llamó y nos pudo seguir desde su habitación. El público creo que lo ha cogido bastante bien".

Volverán. Eso es seguro. "La idea es darle continuidad, no bajarnos del burro. Estábamos incluso con la ilusión de pasar de fase", apunta Galán. "Tenemos que mejorar mucho, pero hay cosas que obviamente no se pueden cambiar". ¿Cuál es la principal dificultad? La memorización del texto, aprender los versos y las rimas... Hay que dar el pie en ocasiones para que se acuerden y puedan continuar con los textos rimados". En cambio, "a nivel musical, en eso no tienen problemas. Quizás un poco la afinación y es que se aprende mejor cantando que hablando".

Da la clave. "Son personas que necesitan apoyo, pero con ese apoyo, pues te das cuenta de que pueden hacerlo perfectamente. Incluso, por ejemplo, cantando. Todos cantan mejor que yo".

¿Tiene cabida este cuarteto en el Concurso del Falla? Álvaro Galán responde con otra pregunta. "¿Por qué no? Son personas y han hecho un trabajo digno. No es ninguna locura. Yo no pido que nos premien. Pero lo que hacen ellos es Carnaval. Y además son muy grandes aficionados. Se conocen todos los nombres de las agrupaciones, sus coplas. Yo entiendo que haya gente a la que no le guste, pero ellos hacen Carnaval".

"La visibilidad es lo que nos engrandece y emociona. Lo que recibimos de 'feedback', sobre todo de personas con discapacidad, es algo increíble. Al fin tienen un referente, nos comentan. Ellos ven que es posible. Siempre podemos mejorar. Pero la empatía con la que se ha acogido esta agrupación es exquisita, por parte del grupo, por parte de la afición, por parte de los carnavaleros y por parte de todos. Es nuestro objetivo, la búsqueda de la inclusión total".