«Nos enteramos de que venían refugiados afganos por un grupo de WhatsApp. Nos llegó un mensaje de una mujer, Leticia, que trabaja en la base y había recibido la información mediante Ashley, una americana que vive allí. Pedían ropa, mantas, cosas para los bebés. Nos daba miedo que fuera un bulo, pero nos pusimos manos a la obra», explica Elisa García, perteneciente a la comisión de la Hermandad del Amor de Rota.
Lo que comenzó por una comunicación a través de mensajería instantánea va camino de convertirse, si no lo es ya, en una enorme cadena solidaria. Las llamadas no cesan y los bienes de primera necesidad se amontonan a la espera de que se consume la llegada de los primeros evacuados.

Rota, solidaridad sin fronteras

Uno por uno se amontonan los bultos, cajas o bolsas, en el interior de la Parroquia de Nuestra Señora del Carmen. Todo debidamente clasificado y etiquetado, tanto en inglés como en español, «así es como lo quieren los americanos», comentan.

La habitación de la joven Hermandad del Amor, erigida como tal desde diciembre de 2006, se queda diminuta gracias a las distintas aportaciones altruistas. Sus miembros hacen honor a su nombre, «esto es lo mínimo que se puede hacer, en momentos de necesidad es cuando las hermandades deben funcionar».

Ellos fueron los primeros en movilizarse. Emprendieron su campaña como se hace hoy en día, mediante redes sociales. «Publicamos un comunicado el lunes por la noche, en él solicitábamos la acción de todos los que quisieran colaborar. Dijimos que abriríamos el viernes 27 y el martes 31 para recibir todo lo donado», detalla Francisco Martín, secretario de la cofradía.

Rápidamente tuvieron que cambiar sus planes. «La publicación ya supera las 7.000 interacciones, por lo que hemos tenido que abrir cada día para poder facilitar que todo el mundo haga su aportación».

Rota es un pueblo solidario, pero también lo son Cádiz, San Fernando, Chiclana, Jerez, El Puerto de Santa María, Puerto Real… «nos escriben personas de todos lados de la provincia. Intentamos organizarnos porque muchos no pueden venir y hay que recoger las donaciones».

El altruismo también supera los límites de Cádiz, «nos han preguntado en Los Palacios, les hemos dicho que esperen. Lo mismo también empezamos a movilizar a la gente de Morón porque no sé si ellos necesitan ayuda».

Todo es poco para atender las necesidades de tantas personas que escapan de una situación convulsa y abandonan su país de origen. «Van a venir personas sin sus familias, mujeres solas, niños sin padres. Es un horror y, al menos, queremos que no les falte de nada el tiempo que estén en Rota». «La solidaridad no conoce fronteras, ni tampoco entiende de religiones o nacionalidades. Debemos ayudar al prójimo, a todo aquel que lo necesite».

«Esto hay que vivirlo para entenderlo. No tengo palabras, no las hay. Las cosas hechas desde el corazón son así, inexplicables. Espero que la gente siga colaborando, no solo para los afganos, también hay mucha gente que pasa necesidad y que, seguramente, estén más cerca de lo que nosotros pensamos», apunta Valle, de la Hermandad de Santo Entierro.

Coordinación municipal

Junto a las mencionadas, las Cofradías del Nazareno o del Carmen también realizan sus aportaciones. Durante la mañana del jueves está prevista una coordinación con la Delegación de Servicios Sociales de Rota con el fin de sumar todos los esfuerzos y apoyarlos con la logística municipal.

El Ayuntamiento ha querido trasladar su «agradecimiento por todas las iniciativas de solidaridad del conjunto de la ciudadanía roteña que se vienen dando durante los últimos días y que muestra, una vez más, como el pueblo de Rota ayuda a todos los que lo puedan necesitar en los momentos más complicados», felicita Encarnación Niño, delegada de la Presidencia y Relaciones Institucionales.

«Cualquier interesado puede colaborar. Todos los ciudadanos que quieran hacer una aportación deberán realizarlo a través de una asociación, Hermandad o entidad local, la que ellos prefieran», expresa Niño. Este es el método escogido por el Consistorio para facilitar la transmisión del material hacia el interior de la base naval.

«En estos momentos, las primeras necesidades siguen siendo ropa y productos de higiene personal. Sabemos que son numerosas las personas y entidades que se están poniendo en marcha para colaborar. Una vez más, Rota demuestra la solidaridad que tenemos y nos caracteriza», reflexiona Luisa Fernández, delegada de Servicios Sociales.

Las Hermandades, que ya establecieron sus propios enlaces con las instalaciones militares para poder hacer entrega de todas las donaciones recibidas, esperan ahora tutela municipal.

«Está muy bien reunirnos, pero teníamos que actuar con velocidad porque es una situación de crisis humanitaria. Esto no es una cuestión de unos u otros, lo importante es la suma», matizan desde Santo Entierro.