Esperanza Aguirre declarará el lunes ante el juez acusada de desobediencia a la autoridad

La presidenta del PP madrileño, Esperanza Aguirre, acudirá a declarar el próximo lunes como imputada ante el juez Carlos Valle, que instruye la causa derivada del incidente de tráfico que protagonizó en abril pasado en la Gran Vía de Madrid.

Aguirre, que está acusada de haber cometido un delito de desobediencia a la autoridad, dijo estar «encantada de contarle al juez toda la verdad». Su comparecencia llega en plena batalla interna en el PP de Madrid por los carteles electorales para los comicios municipales y autonómicos de mayo.

La expresidenta de la Comunidad de Madrid suena como aspirante a la alcaldía después de que la actual regidora, Ana Botella, anunciara que no se va a presentar. Ella, por ahora, dice que «se deja querer» y que son muchos los militantes que le piden que dé el paso. En las encuestas del PP su nombre aparece como la candidata mejor valorada por los ciudadanos para optar a la alcaldía. «La política no la iba a dejar porque era mi vida», declaró ayer Aguirre en Onda Cero.

No obstante, una sentencia condenatoria en el juicio por desobediencia a la autoridad acarrearía una inhabilitación para el ejercicio de cargo público. Esto apartaría a Aguirre de la carrera por presidir el consistorio.

En el mismo proceso declararán como testigos el 30 de septiembre seis agentes de movilidad involucrados en el incidente y dos policías locales. Aguirre aparcó su coche en el centro de Madrid en un carril de autobuses para sacar dinero en un cajero automático, fue multada, pero se fugó de los agentes.