Los dos pacientes aislados en Zaragoza y Barcelona no tienen ébola
MADRID. Actualizado: GuardarDoble alarma por el ébola y, una vez más, con resultado negativo. Los dos pacientes ingresados en zonas de aislamiento de los hospitales Clínic y Royo Villanova, de Barcelona y Zaragoza, respectivamente, no tienen ébola según indicaron ayer los análisis efectuados por el Instituto de Salud Carlos III de Madrid. Con estos dos casos, son ya cuatro las posibles infecciones que se han conocido esta semana, aunque Sanidad aseguró que se han activado los protocolos en nueve ocasiones.
El hombre ingresado en Zaragoza es un guineano de 38 años que sufre malaria. Llegó a España el 17 de agosto desde su país de origen donde había pasado las vacciones. «Se encuentra plenamente consciente, dentro de su estado febril, y relativamente bien», explicó el gerente del Servicio Aragonés de Salud, Ángel Sanz. Este hombre llegó a urgenicas del hospital Miguel Servet con 38,3 grados de fiebre, dolor de garganta y cefaleas, por lo que se aplicó el procotol y fue ingresado en el Royo Villanova, entro de referencia en Aragón.
Por su parte, el senegalés aislado en Barcelona, estuvo en su país de vacaciones, aunque pasó unos días en Guinea, en una zona alejada de la epidemia. Tras volver a Dakar, capital de Senegal, voló a Barcelona el 20 de agosto. Después de aterrizar, empezó a tener fiebre, dolor al tragar y malestar generalizado, por lo que el pasado jueves acudió por su propio pie al Hospital General de L'Hospitalet de Llobregat y fue ingresado en el Clínic por precaución.
Más medios
La ONU y la Organización Mundial de la Salud (OMS) prometieron ayer entregar medios «sin precedentes» a Liberia para atajar la propagación del virus del ébola. «Esta epidemia excepcional exige una movilización sin precedentes», afirmó el coordinador de la ONU contra el ébola, David Nabarro, según un comunicado de la OMS. Una nueva forma de coordinación permitirá «garantizar que los recursos adecuados van a los sectores que más los necesitan», agregó.
La epidemia gana terreno en Liberia, el país más afectado por el virus, al tiempo que la muerte de 13 personas por una fiebre «de origen indeterminado» en República Democrática del Congo causa preocupación. Por su parte, Costa de Marfil anunció el cierre de sus fronteras terrestres con Guinea y Liberia, para «proteger al conjunto de las poblaciones, incluso extranjeras, que viven en territorio marfileño».