La Junta pide una fianza civil de 6,4 millones para un hijo de Ruiz-Mateos en el 'caso ERE'

La acusación particular que ejerce la Junta de Andalucía pidió ayer una fianza civil de 6,4 millones de euros, que superarían los ocho si se suma el tercio legal, para José María Ruiz-Mateos Rivero, quinto hijo del dueño de Rumasa imputado en la causa de los ERE fraudulentos. Dicha cantidad se repartirá con sus tres hermanos que intervenían en las empresas de Rumasa en Andalucía: Javier, Pablo y Zoido, según la Junta. La Fiscalía no ha pedido ninguna medida contra el imputado.

El empresario, al igual que sus hermanos ya imputados, dijo a la jueza Mercedes Alaya que quien tomaba las decisiones en el grupo era su padre y que el 'conseguidor' Juan Lanzas era un simple colaborador que traía negocio a sus empresas, según informa Efe.

El imputado afirmó que solo coincidió con Lanzas en una ocasión y negó los supuestos pagos en dinero B, que atribuyó al ánimo de venganza de la persona que ha vertido tales acusaciones, el exabogado de la familia Joaquín Yvancos, por su «notoria enemistad hacia la familia».

Los hermanos Ruiz-Mateos figuran entre los 183 imputados por los ERE por las ayudas de la Junta a cinco empresas del grupo Nueva Rumasa, entre ellas el Hotel Cervantes de Torremolinos (Málaga), Dhul y tres bodegas jerezanas. Su padre, José María Ruiz-Mateos, se encuentra a la espera de ser reconocido por el forense de Pozuelo de Alarcón, quien debe determinar si está en condiciones de trasladarse a Sevilla para declarar.