Netanyahu peina Cisjordania
Israel culpa a Hamás y busca casa por casa a los tres chicos secuestrados en Hebrón para evitar una pesadilla como la del soldado Gilad Shalit
EL CAIRO. Actualizado: GuardarEl primer ministro israelí, Benyamin Netanyahum culpó ayer a «miembros de Hamás» del secuestro de tres adolescentes que hacían autostop en Cisjordania y, dentro de su guerra de propaganda contra el nuevo Gobierno de reconciliación palestino, responsabilizó a la ANP y a su presidente, Mahmud Abás, de la suerte que puedan correr los jóvenes. Mientras el Ejército busca a los chicos casa por casa, más de 80 palestinos han sido detenidos en redadas nocturnas en un intento desesperado de evitar un escenario como el del secuestro hace ocho años del soldado Gilad Shalit, que fue finalmente canjeado por un millar de presos.
Naftalí Frenkel, Gilad Shaer y Eyal Yifrah, de entre 16 y 19 años, desaparecieron tras subir a un coche en un cruce cerca de Hebrón, donde habían participado en un seminario en una escuela religiosa. Según la prensa israelí, uno de los chicos consiguió contactar por teléfono con la Policía, pero los agentes no se tomaron en serio la llamada en un principio. Altos mandos del Ejército creen que los adolescentes siguen en Cisjordania, y las Fuerzas Armadas han llamado a reservistas para ayudar a peinar el territorio.
«Hombres de Hamás han llevado a cabo el secuestro. Éste es el mismo Hamás con el que Abás ha formado un Gobierno de unidad. Esto tiene graves consecuencias», dijo Netanyahu en un discurso televisado. El primer ministro, que no ha perdido la oportunidad de atacar a la Autoridad Nacional Palestina y a Abás desde el anuncio del nuevo Gobierno de reconciliación nacional, se ha encontrado con la ocasión perfecta para asestar un golpe -aún está por ver si de gracia- al Ejecutivo.
Si se confirma que Hamas está detrás del secuestro -Netanyahu acusa de momento sin pruebas-, es posible que el apoyo que el Gobierno palestino ha recibido de gran parte de la comunidad internacional, y significativamente de EE UU sea retirado, escribe Barak Ravid, corresponsal diplomático en las páginas de Haaretz. Pero el 'premier' hebreo también se arriesga a que las críticas repercutan en la cooperación con la Inteligencia palestina, que podría ser vital para localizar y rescatar a los jóvenes.
Entre los más de 80 detenidos en las últimas horas se encuentran líderes políticos de Hamás, antiguos ministros, profesores universitarios, clérigos y militantes del brazo armado de la organización. El portavoz del grupo islamista en Gaza, Sami Abu Zhuri, aseguró que las acusaciones eran «estúpidas» y un «acto de agresión» de las autoridades israelíes, y el nuevo Gobierno de unidad reprochó que las detenciones suponen un «castigo colectivo» contra los palestinos. Por el momento ningún grupo importante se ha hecho responsable del secuestro.
La peor pesadilla para el Gabinete de Netanyahu sería que el secuestro acabe enconado como en 2006 el de Shalit, que permaneció cinco años en manos de milicianos en la Franja de Gaza y sólo fue liberado tras la excarcelación de un millar de presos palestinos.