Protocolo anti-suicidios para la madre y a la hija

Instituciones Penitenciarias ordenó aplicar a Montserrat González y a Triana Martínez el protocolo anti-suicidios nada más ingresar en la prisión leonesa de Villahierro. La aplicación del protocolo implica que madre e hija, que no estarán juntas en la celda, estarán vigiladas en todo momento por reclusas de confianza. Les preocupa la situación de Triana, con menos fortaleza mental que su madre y con recientes episodios de depresión. Al tiempo, Raquel Gago Rodríguez, la policía municipal de León que guardó en su coche durante 30 horas el arma homicida, fue suspendida durante dos meses de empleo y sueldo, a la espera de que se esclarezca su papel en el asesinato de Isabel Carrasco, después de que la juez la citase a declarar como imputada.