'Líbano connection'
ROMA. Actualizado: GuardarMarcello Dell'Utri, enlace histórico de Silvio Berlusconi con Cosa Nostra, salió en abril de Italia en vísperas de la sentencia final por sus relaciones con la Mafia. Justo ayer se esperaba el fallo del Supremo, que entonces se aplazó y debe confirmar o no su condena a siete años, pero anoche los jueces seguían reunidos. Al final Dell'Utri apareció el 12 de abril en Beirut, donde fue detenido. Fue una sorpresa y se empezó a intentar descifrar el porqué de ese destino. Aún más cuando este jueves fue arrestado un exministro de Berlusconi por ayudar a otro condenado por mafia a llegar a Líbano.
Claudio Scajola intentaba meter en ese país a Amedeo Matacena, otro exdiputado del magnate fugado a Dubai, como si aquello fuera la solución a sus problemas. ¿Por qué en Líbano? Parte de la respuesta puede estar en un personaje que aparece en ambas historias, un tal Vincenzo Speziali, grabado en conversaciones con Scajola y también cercano a Dell'Utri. Lo demás es tirar del hilo: habría una red de exdemocristianos, neofascistas e influyentes políticos libaneses que garantizarían protección política en el país para convertirlo en un refugio seguro. Las trabas legales y el hecho de que el delito de asociación mafiosa no exista en Líbano podrían dificultar la extradición, incluso con la posibilidad para los interesados de pedir asilo político.
Speziali es un ejecutivo calabrés residente en Beirut y casado con una libanesa que, según medios italianos, es familiar del expresidente Amin Gemayel, de 72 años. Él lo niega, pero en todo caso Speziali es muy cercano a Gemayel, presidente de 1982 a 1988, y candidato para las elecciones de mayo. Speziali es un exdemocristiano, corriente política dominante en Italia hasta los noventa y muy ligada al partido de la dinastía Gemayel, las Falanges Libanesas, cristianos maronitas. De hecho, el líder libanés viajó con Speziali a Roma hace un año tras la muerte del histórico dirigente democristiano Giulio Andreotti y depositó flores en su tumba.
Aparece luego por ahí Gennaro Mokbel, elemento ambiguo del mundo neofascista, amigo del hermano de Marcello Dell'Utri, Alberto, que también tendría lazos en Líbano. Se deduce de las conversaciones grabadas en un restaurante romano a Alberto Dell'Utri en las que preparaba la fuga. En ellas también citó como contacto de confianza a otro importante político libanés, Saad Hariri, que puede ser muy útil: el ministro de Justicia, que debe decidir ahora la extradición, es de su partido.
Matacena no ha logrado llegar a Beirut, pero Dell'Utri sí y ya se han visto sus contactos: tiene un famoso abogado, Akram Azoury, defensor del dictador tunecino Ben Ali, que ya ha empezado a definir el proceso contra Dell'Utri como una operación política. El amigo de Berlusconi tal vez se quede mucho tiempo en Líbano.