Hallan un planeta que recibe la cantidad exacta de luz y calor para albergar vida
El 'Kepler-186f1', con características similares a la Tierra, pertenece a un grupo de cinco planetas que dan vueltas alrededor de una estrella
MADRID. Actualizado: GuardarLos astrónomos de la Universidad de San Francisco han descubierto cinco planetas que dan vueltas alrededor de una estrella, estrella que a uno de ellos le irradia la cantidad exacta de luz y calor como para poder albergar vida. El 'Kepler-186f1', que así ha sido bautizado, podría incluso tener agua líquida en su superficie, según un artículo publicado ayer en la revista científica 'Science'. Después de varios años monitoreando el Sistema Solar con la nave espacial Kepler de la NASA, los científicos han descubierto este planeta y su estrella, situados a 500 años luz en la constelación del Cisne.
La Tierra y el Sol tienen prácticamente la misma relación. El Sol es una masa caliente y brillante a 150 millones de kilómetros de distancia, es decir, lo suficientemente lejos para no vaporizar los océanos, pero lo suficientemente cerca para mantener agua en estado líquido. En otras palabras, la Tierra está en la zona habitable del Sol. Los planetas como Venus que orbitan un poco más cerca del Sol pierden su agua líquida en forma de vapor. Y los planetas como Marte que orbitan más lejos del Sol tienen su agua líquida encerrada en forma de hielo. Dado que el agua líquida es esencial para la vida en la Tierra, muchos astrónomos creen que la búsqueda de vida extraterrestre debería centrarse en planetas donde la hubiera, como es el caso del Kepler-186f. Stephen Kane explica que como este planeta orbita en la zona habitable de su estrella, «es el mejor lugar para empezar a buscar vida». Otro astrónomo, Thomas Barclay, aclara que el nuevo planeta, por sus características, «es un primo de la Tierra, no una Tierra gemela».
Estos cinco planetas fueron descubiertos por el método de tránsito, es decir, mediante la pequeña pero periódica atenuación del brillo de la estrella cuando los planetas que orbitan a su alrededor pasan frente a ella. Gracias a esta información, los astrónomos consiguieron calcular el tamaño del Kepler-186f. Así, descubrieron que es ligeramente más grande que la Tierra, de aproximadamente 1,1 radios terrestres.
El autor del estudio señala que el Kepler-186f se encuentra orbitando en el borde exterior de la zona habitable de su estrella, «lo que podría significar que el agua esté en peligro de congelación». Sin embargo, al ser un planeta un poco más grande que la Tierra, «la atmósfera es más densa y hace que la superficie sea lo suficientemente caliente para mantener el agua en estado líquido», explicó Kane. Por su parte, la estrella es mucho más pequeña y fría que el Sol, lo que hace de ella un lugar propicio para buscar vida. «Las estrellas pequeñas viven mucho más tiempo que las grandes, por lo que hay un periodo mucho más largo de tiempo para la evolución biológica y para que se desarrollen las reacciones bioquímicas en la superficie», explica el autor del estudio. Kane apunta que descubrimientos de este tipo hacen que «seamos conscientes de lo común que es nuestro Sistema Solar y se respondan muchas preguntas acerca de la existencia de vida en otros planetas».