Policías chinos inspeccionan las copias ilegales de la copa del mundo de fútbol halladas en Yiwu. :: AFP
Sociedad

Campeones clónicos

La Policía china se incauta de más de un millar de falsificaciones del trofeo de oro que la FIFA otorga a los ganadores del Mundial de fútbol

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El talento chino para la falsificación no conoce límites. Clonar relojes, bolsos o ropa de marca es peccata minuta para los eficaces y minuciosos copiones asiáticos, capaces de inundar el mundo de réplicas de cualquier cosa, de un llavero a un coche de lujo, pasando por el último dispositivo electrónico o maquinaria pesada. De ahí que no haya extrañado a la Policía china localizar un taller donde se clonaba con garbo la Copa del Mundo del fútbol, el exclusivo trofeo de oro que la FIFA entrega a las selecciones que cada cuatro años ganan el Mundial, que tiene en Brasil su próxima cita.

Antes de la final de Maracaná y por un buen puñado de dólares -yuanes, euros, yenes, libras esterlinas o francos suizos, que los falsificadores no hacen ascos a ninguna divisa- se podía adquirir una réplica del trofeo de la FIFA. No se sabe a qué precio, pero sí que el original, con cinco kilos de oro macizo, ronda los 200.000 euros sólo por el peso del noble metal.

Algo más de un millar de copias dispuestas para su comercialización fueron incautadas por los aduaneros chinos en un almacén de la ciudad de Yiwu, en la provincia de Zhejiang, muy activo enclave para la exportación, legal e ilegal, en el gigantesco país asiático. Lo curioso es que, según admitieron los falsificadores, la partida de trofeos clonados iba ser enviada a Libia, conflictivo país norteafricano de escasa tradición futbolística pero con gran afición al fulgor del oro.

De apariencia idéntica al trofeo oficial, de cerca se aprecia que las chinas no son copias de alta calidad. Las fotos difundidas por la Policía evidencian que el brillo del metal es de un amarillo mucho más chillón que el diseño original, que desde 1974 sustituye a la copa Jules Rimet. Hay un error de bulto en la base del falso trofeo, en la que se inscribe a los países ganadores. En la copa FIFA se graban en el idioma del ganador -1974, Deutschland, 2010, España- pero en la falsas aparecen en inglés los campeones de los últimos cuarenta años: Germany (1974, 1990), Argentina (1978, 1986), Italy (1982, 2006) y Brazil (1994, 2002) junto a France (1998) y Spain (2010).

Silvio Gazzaniga diseñó el trofeo original producido por Bertoni, un reputado orfebre milanés. Mide 36,8 centímetros de altura y está hecho con 5 kilos de oro de 18 quilates, sobre una base de 13 centímetros de diámetro con dos anillos concéntricos de malaquita. Pesa en total 8,175 kilos y representa a dos figuras humanas sosteniendo al planeta Tierra. Ningún país ganador lo recibe en propiedad.

La incautación es fruto de la intensa campaña lanzada por las autoridades chinas contra la falsificación de objetos relacionados con el fútbol, sector que bulle ante la proximidad del Mundial. El mercado se satura con botas, camisetas y balones tan falsificados como la mascota del evento, Fuleco, simpático armadillo del que se han incautado más de un millón de copias ilegales en apenas unos días.