A VERLAS VENIR
Actualizado: GuardarSeguro que a día de hoy, lunes, ya han leído suficientes análisis sobre la crisis de los socios de gobierno. Me encantaría ahorrarles uno nuevo, ahora que estalla el azahar, las cofradías devuelven a las calles emociones y memoria, la gente huye a las playas, las torrijas tientan las más rigurosas dietas, pero me temo que el asunto va a seguir coleando aún mucho tiempo, hasta que el «supremo interés común», o sea la conveniencia partidaria, diga hasta aquí hemos llegado.
Así que seguiremos informando. Los interrogantes abiertos se multiplican: A ver si cuando hoy vuelvan todos a sus despachos en Fomento se registra alguna carta de cese o si por el contrario se mantiene el pulso a la presidenta Díaz, porque la secretaria general de Vivienda, Amanda Meyer, pretende realojar a los okupas de la corrala Utopía que ahora no han entrado en el lote. La gestión en cualquier caso está en entredicho: ni siquiera sabían de cuántas familias estaban hablando.
A ver también si en la asamblearia IU han tomado el poder los 'bolivarianos' o los 'colaboracionistas'. A ver si en el PSOE pueden seguir defendiendo que al final no han tenido que doblegarse. A ver qué pesca el PP de todo esto, a parte de escamotear la responsabilidad del Ayuntamiento de Zoido en el problema de vivienda y de apagar informativamente las escandalosas acusaciones de Bárcenas sobre las cajas B y sus responsables.
A ver, en fin, quién piensa en los andaluces, que asisten atónitos al espectáculo como si los marcianos hubieran invadido la tierra.
La política andaluza es cada vez más esperpéntica, a lo Valle. Cada cual se mira en un espejo deformado y ve lo que quiere. La Junta va a tener más complicado que de costumbre infundir confianza en el futuro y no digamos ya en su capacidad de hacer frente al deterioro general del Estado de bienestar. La legislatura entra en barrena después de dos años de práctica inacción. Si persiste el presagio de elecciones anticipadas, podrá darse por perdida y eso, en este contexto de crisis, sería bastante curioso.