Un tribunal de Tel Aviv declara culpable de corrupción al ex primer ministro Ehud Olmert

El ex primer ministro Ehud Olmert se sumó ayer a la lista de mandatarios israelíes que conocerán el interior de una celda al ser condenado en firme por un tribunal de Tel Aviv por aceptar sobornos cuando era alcalde de Jerusalén. El político centrista, que tuvo que abandonar la jefatura del gobierno en 2008 por el escándalo de corrupción urbanística que parece haber acabado con su carrera política, podría tener que enfrentarse con hasta diez años de prisión.

El juez David Rosen consideró probado que Olmert había recibido hasta 560.000 shekels (116.000 euros) de los promotores de Holyland, un complejo de apartamentos de lujo al sur de Jerusalén, a cambio de autorizar su construcción mientras ocupaba la alcaldía de la ciudad (1993-2003). La Fiscalía le acusaba de haber recibido hasta 800.000 shekels, pero el político fue absuelto de otros dos cargos de corrupción. Otros nueve acusados, entre ellos otro exalcalde y varios constructores, también han sido condenados.

El exmandatario, que ha negado los cargos, piensa apelar la condena. Al término de la sesión su abogado, David Libai, afirmó que tenían que estudiar la condena. «Necesitamos tiempo para revisar y analizar el veredicto», dijo en declaraciones a la prensa a la salida del juzgado. Según el magistrado, el caso ha sacado a relucir un sistema político «que se fue haciendo cada vez más corrupto y podrido con los años», y la prensa israelí deduce de las duras palabras del juez, que dijo que Olmert había intentado manchar a reputación de uno de los testigos de la fiscalía y había «mentido en el tribunal», que no podrá librarse de la cárcel. Por el momento no se ha fijado fecha para conocer la pena que corresponderá al ex primer ministro, y es posible que la apelación prolongue el caso durante meses.

Su regreso a la política, con el que se había estado especulando en los últimos meses debido a sus constantes críticas públicas al primer ministro Benjamín Netanyahu, podría ser ya una utopía. Olmert coincidió en el poder con el entonces presidente Moshe Katsav, condenado por violación y que actualmente cumple una sentencia de siete años de cárcel.