El multimillonario Adelson busca un candidato republicano a la Casa Blanca
NUEVA YORK. Actualizado: GuardarFaltan dos años y medio para los comicios presidenciales en los que se elegirá al sucesor de Barack Obama, pero las 'primarias de Adelson' ya han comenzado. No son los habitantes de Iowa o New Hampshire los que están eligiendo al representante presidencial de cada partido, sino el multimillonario de Las Vegas Sheldon Adelson, que dedicó el fin de semana a entrevistar a los principales candidatos republicanos en su reino de la ruleta.
El escenario para probar el 'sex appeal' de los aspirantes frente a una audiencia projudía era mayoritariamente público, la reunión primaveral de liderazgo de la Coalición Judía de Republicanos, que Sheldon organizó en su aparatoso hotel casino The Venetian. Las entrevistas personales con el excéntrico magnate de las apuestas, muy privadas. Los aspirantes a candidato convocados: Jeb Bush; el gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie; el de Wisconsin, Scott Walker; el de Ohio, John Kasich; y el exembajador ante la ONU John Bolton. Ostentosamente excluido, pero no por ello olvidado, el senador libertario Rand Paul, cuyas críticas al intervencionismo estadounidense en el mundo espantan a todos los reunidos.
Ninguno de los aspirantes era judío, pero todos sabían que tenían que rendir pleitesía a Israel para complacer no ya al embajador de este país, al que se reservó un lugar de honor en el estrado, sino al multimillonario que todos quieren como padrino. Los 93 millones de dólares (67,5 millones de euros) que Adelson se gastó en apoyar al exportavoz del Congreso Newt Gingrich y luego al candidato republicano Mitch Romney son una minucia en la fortuna de 36.900 millones de dólares (26.800 millones de euros) que Bloomberg le asigna. Según la lista de multimillonarios de la agencia, el fundador de Las Vegas Sands Corp es el décimo hombre más rico del mundo.
El poder financiero de Adelson no se limita a su propia fortuna y la de su esposa, sino que, como dijo el propio Gingrich el viernes a National Journal, Sheldon «puede atraer a otros muchos jugadores que quieran juntarse con él».
Si bien las leyes electorales de EE UU sólo permiten contribuciones individuales a las campañas electores de hasta un máximo de 2.600 dólares (1.890 euros), una polémica decisión del Supremo en 2010 abrió las puertas a aportaciones ilimitadas a plataformas de acción política que apoyen al candidato pero en teoría no se coordinen con él.