Fachada de un edificio en mal estado. :: SUR
ANDALUCÍA

La apuesta por la reparación

La Junta incrementa las partidas para la rehabilitación de viviendas y el arreglo de carreteras

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El pasado jueves entró en vigor el decreto ley del Programa de Impulso a la Construcción Sostenible en Andalucía y mañana martes se abre el plazo para solicitar los incentivos. Este decreto, dotado con 200 millones de euros, prevé la creación de cerca de 7.000 puestos de trabajo en Andalucía, la mayor parte en obra en las casas para mejorar su eficiencia energética. Este decreto, gestionado por la Consejería de Economía, se ve como un acicate para la creación de empleo relacionado con la rehabilitación de vivienda que lleva a cabo la Consejería de Fomento. Desde esta se insiste: la rehabilitación de casas lo mismo que el arreglo de carreteras genera tres veces más empleo que la obra nueva. Ambas actividades son de las pocas que no sufren recortes en los presupuestos de 2014.

«Lo más sostenible es rehabilitar lo ya construido», reitera con frecuencia la titular de Fomento, Elena Cortés. Su departamento maneja estadísticas que así lo corroboran y en el plan de la vivienda que prepara la rehabilitación será predominante con el objetivo además de recuperar los centros históricos de las ciudades para uso residencial. Esta política de reparar antes que edificar tiene mucho que ver con la crisis y el fiasco del ladrillo (hay 700.000 casas vacías sin vender), pero también pretende cambiar la cultura del modelo productivo, mirar más a países como Alemania.

Según el Ministerio de Fomento, por cada millón de euros invertidos en rehabilitación se genera 56 empleos estables (más de un año con sueldo del convenio de la construcción), tres veces más que en obra nueva. La Confederación Nacional de la Construcción rebaja esta cifra a 30 empleos estables.

Desde la consejería andaluza se apunta que hay que considerar que la rehabilitación responde a un modelo productivo en el que «no hay gasto de adquisición de suelo ni de estructura, porque se actúa sobre edificios ya existentes en terrenos ya disponibles». Las tareas se centran más en albañilería y se encomiendan en su mayoría a pequeñas y medianas empresas, que hacen la obra directamente, sin promotores que subcontraten la actuación, «con lo que la plusvalía se invierte en mano de obra y no en ganancia del capital».

La rehabilitación es una tarea incipiente en España y Andalucía, muy lejos de la media europea. En la UE, el 41% del total de la construcción se destina a rehabilitación, con casos excepcionales como Alemania, en la que se alcanza el 56%. España y Andalucía se alejan 13 puntos, ya que solo llegan al 28%.

Las perspectivas de hacer negocio y crear empleo con la rehabilitación son buenas, según Fomento. Más de dos millones de viviendas son potencialmente rehabilitables en esta comunidad.

Previsiones

Esta apuesta por la reparación tiene reflejo en el Presupuesto de 2014, en el que Fomento destina casi 140 millones de euros, un 11,2% más que el año pasado, a la rehabilitación. La previsión, dentro de un plan marco, es intervenir en 94.700 viviendas hasta 2020, según fuentes de la consejería. Además de la Junta habrá financiación del Gobierno central (137,6 millones de euros hasta 2016); y de la Unión Europea (775 millones hasta 2020). Hay que recordar que la financiación del programa de la construcción sostenible sale de este monto. La UE no subvenciona obra nueva, solo rehabilitación.

En cuanto a la conservación integral de carreteras (incluida la poda de la vegetación) la inversión se dedica en un 60% a la contratación de personal, cuando en la construcción de carretera nueva este porcentaje cae por debajo del 30%. Según los datos de Fomento, cien mil euros al mes en reparación y mantenimiento implican la contratación de 21 personas en los centros de conservación de carreteras de la consejería. Mientras que 1,2 millones de euros anuales en inversión de nuevas infraestructuras solo genera 10 empleos directos y otros siete indirectos. Es decir: con trabajos de reparación y mantenimiento se crean 21 empleos fijos en un año, mientras que con obra nueva solo 10.

La crisis y el objetivo del déficit público también ha forzado a minimizar las nuevas infraestructuras, pero se ha potenciado la reparación: En el presupuesto de 2014 sube un 13% la partida para conservación y mantenimiento de la red viaria, pasando de 45,71 millones de euros a 51 millones de euros.