Muere un soldado en unas maniobras en Zaragoza al no abrirse su paracaídas

Un soldado de 24 años falleció en la madrugada del viernes al no abrirse su paracaídas durante unos ejercicios en el campo de maniobras de San Gregorio (Zaragoza). Antonio García Sierra era natural de la localidad toledana de Quintanar de la Orden y pertenecía al batallón de Cuartel General de la Brigada Paracaidista (Bripac VI) del Ejército de Tierra con sede en Paracuellos de Jarama (Madrid). El soldado participaba en unas maniobras de lanzamiento nocturno tipo Alfa, que consisten en saltos con apertura manual por parte del paracaidista, que se están desarrollando en los cielos de Zaragoza desde el pasado 25 de marzo y hasta el próximo 2 de abril.

Por causas que se desconocen, el paracaídas de García Sierra, quien participaba en la primera rotación de un lanzamiento, no se llegó a abrir en el momento del salto, ni siquiera de forma parcial. A pesar del tremendo impacto, el militar llegó con vida, aunque herido de extrema gravedad, al hospital MAZ de la capital aragonesa, donde finalmente falleció. La familia del militar fallecido se desplazó a Zaragoza para hacerse cargo de los restos mortales, que serán trasladados hoy a Toledo para su funeral y entierro. El alcalde de Quintanar de la Orden, Carlos Madero, declaró dos días de luto en la población.

Investigación

El Ministerio de Defensa ha abierto una investigación interna para determinar si el accidente se debió a un error humano o a un fallo en los sistemas de seguridad del paracaídas. Desde la supresión del servicio militar obligatorio hace trece años, cuatro soldados han fallecido en accidentes en saltos paracaidistas.

El último siniestro mortal fue en noviembre de 2012, cuando un soldado del Ejército del Aire de 31 años murió cuando saltaba en el término municipal murciano de Mula.