El Gobierno plantea una quita del 50% en la deuda de las autopistas de peaje para no liquidarlas
MADRID. Actualizado: GuardarLas cuentas, por fin, están claras. El Gobierno planteó ayer a los seis grandes bancos españoles (Santander, BBVA, Caixabank, Popular, Sabadell y Bankia) que acepten una quita del 50% en la deuda de 4.600 millones de euros que arrastran con ellas las nueve autopistas de peaje que están en concurso de acreedores.
Dichos bancos, que representan también a otro medio centenar de entidades financieras acreedoras de las concesionarias de esas autopistas, recibieron la propuesta de crear una nueva sociedad con ellas de capital 100% público, en vez de dejar el 20% a las constructoras como se había manejado meses atrás.
Se evitaría así que la Comisión Europea pudiera considerar la operación como una ayuda ilegal de Estado. En concreto, la Administración reconocería a los bancos una deuda de 2.400 millones de euros (en vez de los 3.600 millones que tenían anotados en sus créditos), que se financiarían con una emisión de bonos a un plazo de 30 años e interés mínimo del 1%, variable según el tráfico que vayan registrando.
Los últimos datos de Fomento apuntan una caída del 52,3% de su tráfico hasta febrero respecto a los dos primeros meses de 2013, que ya fueron deficitarios en la demanda del sector. En el conjunto de las autopistas de peaje, sin embargo, ese descenso fue inferior al 1%.
El Estado reconocería también una deuda de 1.200 millones por las expropiaciones de los terrenos donde se levantaron las autopistas. No obstante, quedarían por resolver los 470 millones que reclaman las concesionarias por sobrecostes en su construcción.